Este tema, ‘Danzar sobre la tierra’, al final cambia de tercio, se agita, para hacernos recordar un corazón «que se ha convertido en piedra». Es el lado amargo de una vida adulta, que también se recoge en ‘MarEa’, una de las producciones más ambiciosas y que, entre «olas», «auxilio» y un «hombre que apunta» el «gatillo», nos hace pensar que podría hablar de la crisis migratoria. En esos momentos podríamos pensar en los arreglos de Owen Pallett o en las canciones más aventureras de Decemberists, pero lo de Karmento en verdad es más tradicional. Le inspira el folclore de su tierra, situándose cerca de gente como la también manchega Rozalén o Rocío Márquez. De tener alguna influencia internacional, quizá podríamos referirnos a Nick Drake.
Entre esa seguidilla manchega que anima a la mitad de la secuencia (‘La manchega en la azotea’), es destacable cómo la música puede servir de refugio a la artista. Le dedica a un «La» uno de los temas más hermosos (‘La m’), mientras el que dedica al costumbrismo a lo largo de los años (‘La jornada’) o al de la pérdida de «la magia», pasan más desapercibidos. Es su bonita voz -ese bien que se está perdiendo- la que deja los momentos más destacables, así como esos gemidos que entre un rasgueo de guitarra y un violín interfieren en ‘Bienmesabe’. En cuanto a textos hay que destacar el de ‘Qué feo’ por lo que tiene de autocrítico. «Dejo a todo a medias y lo llamo libertad», «miento porque me da mucho miedo lo que hay detrás de la verdad», «que el miedo al abandono ya no sirve para ocultar la verdad»… Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra.
Calificación: 7,2/10
Lo mejor: ‘Danzar sobre la tierra’, ‘Cri Cri’, ‘MarEa’, ‘Qué feo’
Te gustará si te gusta: Rozalén, Rocío Márquez, Vicente Navarro
Youtube: ‘Danzar sobre la tierra’, en Youtube