Tenemos que tener paciencia con los discos post-pandemia de los artistas: es normal que todos o casi todos tengan algo que expresar ante tan turbulento período de nuestras vidas, y que vayan llegando poco a poco, dosificados, en lugar de todos durante la misma semana o el mismo mes. Suelen tener mucho que ver además con nuestro propio sentir, por mucho que el tema a estas alturas esté ya muy visto, como es el caso. La idea de Foals ha sido grabar un disco en el que hablan de lo que han echado de menos la pista de baile. En muchos sentidos, ‘Life Is Yours’ es su álbum más pop y colorido en ese sentido, hasta hacernos olvidar sus momentos más rockeros y turbios para aproximarse más bien a gente como Two Door Cinema Club.
Ahora sus referencias expresas son gente como The Rapture y Caribou, y hasta puede que te acuerdes de Human League en los primeros instantes del tema llamado ‘Under the Radar’. Paradójicamente llegan a este sonido justo en el primer álbum que construyen tras la marcha de su teclista, Edwin Congreave, que ha dejado la música por un Grado en Económicas, al que parecen sustituir con un plantel de productores más variado que nunca, en el que figuran John Hill, Dan Carey, A. K. Paul y Miles James. Algunos de ellos han trabajado con nombres como Kae Tempest y Fontaines D.C., como es el caso de Dan Carey. Otros tienen un perfil más pop, como John Hill, al que lo mismo le da M.I.A. que Shakira.
Sin embargo, las tareas aparecen bien repartidas en pos de la coherencia interna y ha sido Dan Carey quien ha convertido la maqueta «lenta y aburrida de ‘2am‘», según las propias palabras del grupo, en algo mucho más divertido. Las ansias de bailar referidas son también muy perceptibles en ‘2001’, el tema en el que se han inspirado en ‘House of Jealous Lovers’. En él recuerdan los tiempos en que se mudaron de Oxford a Brighton, vivían todos juntos y solo pensaban en salir… que es lo mismo que les ha pasado en la pandemia. «Llevo esperando todo el día dentro, esperando por el cielo estival…»
También recuerda a The Rapture el single ‘Wake Me Up’, del que surgió una coda que ha terminado convertida en el tema que abre el álbum, ‘Life Is Yours’. Por ahí las guitarras y las baterías nos sitúan también a finales de los 70 y principios de los 80 y nombres como Chic, Talking Heads y Prince pueden venir a la mente ahora escuchando a Foals. Lejos los tiempos de ‘Spanish Sahara’, ¿verdad?
El registro les sienta muy bien, porque de hecho ya habíamos bailado de lo lindo con Foals, hasta el punto de que la espléndida ‘My Number’ -una de las mejores canciones de 2013– ha terminado siendo en verdad la canción más popular de toda la carrera del grupo, seguramente gracias a la fiesta que se solía formar siempre durante su interpretación en vivo. Y la gran pega es que ‘Life Is Yours’ viene a demostrar que no es tan fácil hacer buena música de baile durante un disco al completo, y el ánimo decae hacia la mitad con composiciones más anodinas como ‘Flutter’ o incluso con el desarrollo de algún tema que apuntaba más alto. Por suerte, todo remonta al final con el ritmazo de ‘The Sound’ y sobre todo el principio de ‘Wild Green’, donde no sé si se alcanza la maestría de Caribou, pero sí desde luego el nivel de unos Hot Chip.