Cuánto echábamos de menos a Yeah Yeah Yeahs en varios sentidos. El más valorado para las corrientes de opinión de hoy parece el liderazgo de una mujer en una banda de rock. Sigue habiendo poquísimas a la cabeza de los festivales. Además, Karen O es de origen surcoreano y no va a quedar ni una entrevista con un medio prestigioso, como ha sido el caso de The Guardian o New Yorker, en la que no le pregunten por eso. Muy educadamente, ella celebra la llegada de nuevos referentes como Japanese Breakfast, que además va a ejercer de telonera para la banda en una gira.
Pero hay más: casi ningún vocalista de los grupos de rock de los 2000 ha podido igualar el carisma sobre las tablas de Karen O, en su momento muy conocida por intentar tragarse el micrófono y escupir cerveza sobre la audiencia; ni mucho menos aquellas bandas han mostrado la inquietud ni el carácter camaleónico del trío formado junto a Nick Zinner y Brian Chase. Yeah Yeah Yeahs comenzaron a ser conocidos en los tiempos de un revival post-punk y punk-funk que no le hacía ascos a la pista de baile. Temas como ‘Maps’, ‘Heads Will Roll’, luego ‘Zero’ e incluso el góspel ‘Sacrilege’ fueron pinchados en discotecas tipo Razzmatazz, Ochoymedio y sus equivalentes internacionales. En ellos siempre estuvo la necesidad de dar un paso más, pues ya habían nacido con referentes de escenas diversas como New Order, ESG o Beastie Boys.
Su último disco hasta ahora, ‘Mosquito’ (2013), les dejó en punto muerto. No estaba nada mal (‘Subway’, ‘These Paths’… eran producciones excelentes), pero no se entendió, la escena estaba evolucionando hacia una de las décadas menos rockeras que recordamos, y además se les acabó el contrato con Interscope/Universal. Tanto Brian Chase como Karen O tuvieron hijos y no fue hasta que los niños empezaron a ir a primaria que el gusanillo de actuar empezó a picarles otra vez. Durante años, ni se les había ocurrido volver, ni sabían si lo harían. Karen O, la más esquiva, cuenta ahora que todavía no ha tenido tiempo de asumir ni su maternidad, ni la pandemia ni «cuatro años de Trump».
Las tres cosas están en este ‘Cool It Down’ que viene presentado por un single tan abrasador como ‘Spitting of the Edge of the World‘. De nuevo huyendo de un carácter estrictamente rockero, se trata de una colaboración con Perfume Genius -quien jamás ha perdido el culo por un hit en el indiemainstream- plenamente concentrada en transmitir su preocupación por el futuro del mundo. El cambio climático o las preguntas que nos harán nuestros hijos para avergonzarnos («Mama, what have you done? / I trace your steps / In the darkness of one / Am I what’s left?») aparecen en un tema que ciertamente quema cuando se escucha. Es otro gran trabajo del considerado «cuarto Yeah Yeah Yeah», el productor Dave Sitek, que mantiene un gusto excelente.
La misma sensación de urgencia apremia en ‘Lovebomb’, con Karen O suplicando a las estrellas que no le fallen en este momento. En muchos momentos de ‘Cool It Down’ la cantante habla y susurra, más que canta, como en la final ‘Mars’ que retrata otra conversación con su hijo, lo que tampoco quiere decir que el grupo haya dejado escapar un par de bangers.
Si el segundo single ‘Burning’ va elevando su voz, acercándose poco a poco a la pista de baile como una producción de los mejores The Rapture, con toques de música disco (curiosamente comparte elementos con ‘Beggin’ de Frankie Valli & the Four Seasons); ‘Wolf‘ parece la verdadera ganadora de esta era, con cierto poso ochentero y la mejor interpretación vocal de Karen O en este álbum. Por su parte, ‘Fleez’ anima al cambio al mismo tiempo que incorpora un sample de los mencionados ESG, a quienes a su vez cita.
El disco se cierra con una serie de canciones más vagas: deja muchas dudas ‘Different Today’, pegadiza tan sólo por su propia holgazanería, y la cosa no mejora mucho a continuación, pues ‘Mars’ no dura ni 2 minutos, lo cual significa que el primer disco de Yeah Yeah Yeahs en 9 años contiene 8 temas que duran en total 32 minutos. Un par de temas en serio más y tendríamos entre manos uno de los mejores álbumes de la banda.