Daniel Sabater Jiménez es otro de esos artistas españoles asociados al “bedroom-pop” que buscan hacerse hueco más allá de los confines de internet. Con casi medio millón de oyentes en Spotify, el cantante murciano está acostumbrado a que sus singles sueltos superen los millones de escuchas en la plataforma sueca. Ahora, con la ayuda de Sony, acaba de publicar su primer disco largo.
‘ya se me pasará’ es supuestamente un disco conceptual que narra una relación sentimental desde que empieza hasta que acaba. No es el “concepto” más profundo ni interesante pero ‘ya se me pasará’ sí funciona como álbum de pop al uso, con la gracia de que sus canciones compartan el mismo hilo conductor, aunque a eso a duras penas se le pueda llamar “conceptual”.
Llama la atención que el contenido de ‘ya se me pasará’ no dista demasiado de lo que ofrecía daniel sabater (él escribe su nombre en minúsculas) en su primer single, ‘Helado’, ya en 2020. Lejos de esconder sus sentimientos en brumas de R&B o algo parecido, sabater lleva por bandera su gusto por las melodías más “cheesy” del pop y eso, junto con la colorida co-producción de Roy Borland, es lo que encontramos en ‘ya se me pasará’, muy especialmente en ‘fue bonito mientras duró’, que trae a la mente el ‘You’ve Got a Friend in Me’ de Randy Newman entre referencias a ‘La La Land’ y una canción indeterminada de Bruno Mars que sabater ya no puede escuchar, pues le recuerda a su ex.
Algunas melodías de sabater suenan deliberadamente familiares y clásicas, cuando no directamente holgazanas, como la de ‘qué pasó? ya te olvidaste de mí?’, que parece inspirarse sin tapujos en el “songbook” americano y cae más en el cliché que en la atemporalidad. Sin embargo, la producción del álbum, tan “de ordenador”, y el hilillo de autotune aplicado a la voz de Daniel, hace que ‘ya se me pasará’ suene a su tiempo, incluso cuando canciones como ‘un poco más’ o ‘suave’ nos llevan a las radios de pop-rock de los 80, o incluso cuando se atreven con el bolero ‘bolero de desamor’, en el que sabater entrega una romántica letra llena de bonitas rimas que se miran en el espejo con los clásicos.
Dice sabater que ‘ya se me pasará’ es “una mezcla rara de un montón de cosas al final”, pero realmente el álbum sí logra sonar unificado gracias a sus componentes instrumentales. Aunque ‘nadie más’, con Gus, incorpore guitarras punk-rock, aunque ‘Y LOVE U’ opte por un beat de pop casi rudimentario, aunque «qué pasó» suene tropical, el álbum no deja la sensación de ser un batiburrillo de ideas. Más bien, las melodías clásicas y «cute» de sabater terminan por conformar un trabajo bien cerrado. Así, ‘de qué sirve?’ se abre paso con un estribillo precioso y ‘canción de amor’ -la mejor de todas- podría haberla escrito Billie Eilish si eso de que está «más feliz que nunca» fuera verdad. El tema titular, dedicado a un familiar que ya no está, cierra el álbum desde la melancolía. Quizá no podría haber sido de otra manera.