El podcast de JENESAISPOP, REVELACIÓN o TIMO, está de vacaciones, pero compartimos el segundo de los especiales de verano, tras el dedicado a los Smiths. Y hay relación, pues Morrissey ha sido una de las grandes obsesiones de Astrud.
Creado en Barcelona a mediados de los 90 por Manolo Martínez y Genís Segarra, el dúo despuntó en el underground español de la época tras su primer EP en Acuarela y el posterior fichaje en Chewaka/Virgin. Sus melodías únicas, inteligentes letras llenas de aristas y su producción primero electropop y después más clásica, conquistaron a miles de seguidores. Un grupo de gente quizá pequeño para las expectativas de Virgin, pero increíblemente fiel, que dura hasta hoy, años después de la separación de Astrud. O de lo que entendemos por la misma.
En este episodio del podcast debatimos sobre si el grupo era indie o no indie, LGTB+ o no LGTB, raro o no raro, comercial o experimental, o sobre si han separado o no. Hablamos de sus cuatro discos de estudio, y también de alguna curiosidad como el recopilatorio ‘Algo cambió’ o aquella banda sonora loca que hicieron y que incluyó un tema llamado ‘Yo he comido caca’.
Mientras Genís Segarra ha declinado participar en el podcast, Manolo Martínez sí nos ha mandado gentilmente algunas declaraciones. ¿Cómo recuerda aquellos años? “Pienso mucho en mi época de Astrud. La de tocar más, que fuera lo más importante de mi vida… Esa época se me presenta a menudo con orgullosísimo: siempre había querido tener un grupo. Y que mi grupo estuviera bien (…) que le resonara a la gente con sus cosas, que la gente quisiera oír, hacernos caso, preguntarnos por aquella letra, aquel sample de dónde venía… pues es muy chulo. Tengo nostalgia por todo lo que haya pasado hace más de 3 semanas, y de mi grupo mucho más. Nostalgia y orgullo. No me pasa que no quiero pensar en ello. Todo bien, mi grupo fenomenal. Y lo que viene después, Hidrogenesse, súper guay. Haber estado cerca de Genís, haber visto cómo hacía las cosas, es una suerte muy grande”.
También recuerda curiosidades de las letras más tóxicas y críticas, tan avanzadas a su tiempo: “Sí éramos conscientes de lo que estábamos haciendo. ‘He vuelto’ tiene los mismos acordes que ‘Caridad’ en el mismo orden, porque hablan del mismo personaje. Quizá cambié algo por licencia creativa, pero quería dar a entender que eran el mismo personaje. Si hubiera sido tipo 60’s, habría puesto los acordes al revés o les habría dado la vuelta, pero están en el mismo orden. Y sí, ‘Caridad’, ‘Atención’, Minusvalía’… hablan de ese tipo de personajes (tóxicos) y éramos conscientes».
¿Cree Manolo que la gente era consciente de ello? «No sé si la gente se daba cuenta o no. Pero como oyente me pasa lo mismo. Es irresistible la tentación de pensar que el cantante canta sobre sí mismo: cuando oyes a La Bien Querida o Caroline Polachek, piensas qué cosas tan fuertes les han pasado a estas personas. Y como yo debería saber, por haber escrito alguna letra, no están contando su vida, como diría Morrissey, cantando su vida. La gente se lo tomaba como que éramos nosotros. Cuando ves que el cantante está cantando su vida, y quieres que te caiga bien, intentas retorcer las letras, cosas desagradables, para que te caigan medio bien».
En la última parte del podcast, preguntamos si la puerta para que vuelvan Astrud está abierta y Martínez responde que sí, si alguno de los dos da con un grupo de canciones adecuadas. “Quizá pase el año que viene, quizá no pase nunca”, indica recordando que siempre llevaron su separación con discreción, sin anunciarla, por si acaso.
El segundo disco de Astrud, ‘Gran Fuerza’, aparece en el libro ‘Un viaje por 200 discos clave del siglo XX’ autoeditado por JENESAISPOP, entre otras razones, dada la mordacidad de sus letras sobre parejas tóxicas, mucho antes de que se hablara tanto de la toxicidad en las relaciones de pareja. Solo esta semana podéis conseguirlo con un 20% de descuento utilizando el código descuento TODONOSPARECEUNAMIERDA. También válido para este pack con el Anuario 2022.
* La grabación de este podcast se produjo hace un par de meses, el 29 de mayo, por lo que un par de comentarios anacrónicos aparecen al final del mismo. Tampoco nos da tiempo a comentar la muerte de Astrud Gilberto, pues esta se produjo una semana después, el 5 de junio.