El trío de mejores amigas formado por las jovencísimas Nora Cheng, Penelope Lowenstein y Gigi Reece regresa tras su prometedor debut ‘Versions of Modern Performance’. El proceso creativo de su segundo trabajo, ‘Phonetics On and On’, ha sido considerablemente distinto a aquel, que fue gestado en el trastero de los padres de Penelope.
Ahora, la banda al completo ya ha terminado el instituto en Chicago y se ha mudado a Nueva York para asistir a la universidad. Aún así, se han mantenido fieles a su ciudad y han grabado este nuevo proyecto allí, en The Loft, el estudio de Wilco. Para la producción, han escogido a la artista galesa Cate Le Bon, quien ha sabido llevar el sonido de Horsegirl un peldaño por encima de su primer disco.
Tirando de una estética indie-rock 100% reconocible, ‘Phonetics On and On’ es uno de esos proyectos que inmediatamente hacen sentir al oyente como en casa. Aquí las ambiciones no se encuentran en la innovación, sino en la sofisticación de un sonido cargado de influencias: Sonic Youth (con quien colaboraron en su primer álbum), Stereolab, Yo La Tengo, The Raincoats o la propia Le Bon, por mencionar algunas. Pese a la familiaridad sonora, la confianza y desparpajo con los que la banda presenta estas canciones son lo que las hace brillar, evitando que sean un mero ejercicio de nostalgia y convirtiéndolas en una refrescante piscina en la que zambullirse en pleno verano.
La juguetona ‘Where’d You Go’ comienza esta aventura de la mejor manera posible, asentando el tono luminoso que impregnará todo el proyecto. Es una introducción desenfadada y ligera a un universo lleno de riffs de guitarras, bonitas armonías vocales y simpáticos “dadadas” y “lalalalas”. En todas las canciones, Horsegirl optan por el minimalismo, reduciendo al máximo posible los componentes necesarios para que estas funcionen. Esta depuración, también perceptible en las letras, las beneficia enormemente, impulsando sus encantadoras melodías y pegajosos estribillos. Gracias a ello, pistas como ‘In Two’ o ‘2468’ -que incorporan un violín- suenan agradables y limpias, haciendo de sus constantes repeticiones una virtud.
Pese a la sencillez, también hay espacio para alguna sorpresa, como ese cambio tonal hacia el final de ‘Rock City’, las dispersas notas que se van colando a lo largo de la adorable ‘Julie’ o el coqueteo folk que ofrece ‘Frontrunner’. Los momentos más logrados llegan de la mano del luminoso indie rock de ‘Switch Over’ y de ‘Well I Know You’re Shy’, cuyas acogedoras guitarras invitan a quedarse a vivir en su melodía.
En ‘Phonetics On and On’, Horsegirl exploran y juegan con sus referencias en busca de su propia voz como artistas, Y lo hacen pasándoselo en grande, con un disco tan divertido como tierno sobre lo maravilloso y lo doloroso de crecer. Es muy difícil resistirse a una colección de canciones que son puro caramelo.