La banda del frágil Patrick Stickles lanzó en 2015 una ópera-rock de 29 canciones que alude a su trastorno bipolar. Sabemos que no suena muy atractivo, pero es una obra enorme.
Este nuevo EP despierta expectación ante su próximo largo, pero más por el hostión artístico que podría pegarse el grupo que por las satisfacciones que este alberga.