Una joyita. Es 100% Kaurismaki, solo hace falta ver un minuto para reconocer su mano. Los colores, la fotografía, ese aire retro como de otra época (si no fuera por la radio constantemente recordando las atrocidades rusas en la guerra de Ucrania), los personajes solitarios y lacónicos, el amor gafado, el equilibrio entre humor y melancolía. No soy el mayor fan de Kaurismaki ni un gran conocedor de su obra (de hecho creo que no he visto ninguna peli suya desde Luces al atardecer) pero diría que lejos de apagarse como otros autores que triunfaban también en festivales en los 90s y 00s, con el paso de los años ha perfeccionado su estilo. Es una película entrañable y muy divertida, con algunos secundarios gloriosos (como el amigo de edad indefinida que cree que canta bien en los karaokes o el guarda de seguridad del supermercado). Los fans del director la van a amar.
A sección oficial a competición, he visto esta película de la directora Raven Jackson. Cuenta determinados momentos de la vida de una chica negra en Mississippi, a salto de mata de niña a mujer, desde su infancia en los 60 en adelante. Son como distintas estampas de cine contemplativo y sensorial que retratan sus lazos familiares, un complicado enamoramiento o su relación con la naturaleza, con bien de sonido de grillos todo el rato y lluvia, mucha lluvia. Cada X escenas había una tormenta con truenos para que no te pudieras echar una siesta tranquilo. Ya le vale a Raven, la de veces que me habré despertado sobresaltado por los putos truenos. He pegado más brincos en la butaca que viendo Expediente Warren. La película tiene estilo (y probablemente estará en el palmarés, porque ya sabemos cómo las gasta este festival) pero le falta ritmo, argumento, progresión dramática, personajes desarrollados que importen... cualquier cosa que pudiera hacerla interesante. Mi sensación (y debo haber visto una película distinta a los críticos de USA, porque la peli ya se ha presentó allí) es que es una nadería con ínfulas poéticas. Y no creo estar solo, viendo ese 4,7 en Filmaffinity y toda la gente que abandonó la sala durante la proyección.
