Os recuerdo que en esta competición me he erigido como dios supremo, omnipotente y si se me apetece, injusto. Si hay sospechas de que alguien está haciendo trampas y me sale del toto expulsarlo de la competición, no me temblará el pulso.
Dicho esto, ¿cómo están, amiwas? ¿Acaso han tenido ya lo que nesesitan? Ahí afuera la gente está aterrada.