Qué debate más rico se ha desplegado. Pero pretender solucionar el problema desmantelando el patriarcado es construir la casa desde el tejado. Es creer en fantasmas y demuestra una falta de comprensión del problema.
Es evidente que hay homofobia y odio al progreso de occidente en la masacre de Orlando. Pero, matar es más que odiar. Los homófobos son de cometer microagresiones, dar palizas en la calle... Perpetrar una masacre (y proclamar simpatía hacia ISIS) es un tema nuevo y requiere medidas concretas que no pasan por desmantelar el patriarcado. El asesino de Orlando cometería masacres no solo contra gays.
La urgencia de gente como Garzón de señalar el machismo es para evitar la islamofobia. Pero es, a fin de cuentas, quedarse corto por prudencia. Una solución más acertada es entender que hay un problema generalizable con el Islam.
#notallmuslims, pero muchos jovenes musulmanes con problemas psicológicos y sociales no especialmente infrecuentes están encontrando en el seno del Islam (no necesariamente radical) un amigo que les reafirma en sus ganas adolescentes de matar y destruir el mundo. Yo de adolescente las tuve, como muchos (deseaba ir al Louvre y quemar la Mona Lisa). Suerte que tengo dos dedos de frente.
El otro día estaba currando (trabajo en un cine) y yo y mi compañera oímos jaleo en la entrada de una sala. Un chaval discutía con sus amigos y una chica que parecía su novia. Tuvimos que pedirles que se fueran del cine, y antes de irse, después de liarla como pudo, el chaval, que era español, nos dijo lleno de orgullo algo en árabe y dijo que pondría una bomba. Sí, es ridículo y de hecho nos meamos de la risa en el momento, pero ilustra el hecho que el islam ofrece una narrativa épica a muchos chavales.
Sin embargo, así como hablar solo de homofobia es quedarse corto, hablar del islam en general ("no son lobos solitarios, tienen un sustento cultural") es inútil a nivel práctico (vuelve a ser como construir la casa desde el tejado). Hay que hablar de psicópatas.