La de Panahi de Palma de Oro sería una opción bastante evidente. Pero acuérdate que el año pasado pensábamos que se lo llevaba "La semilla de la higuera sagrada" por las mismas razones (cine político, director perseguido por la ley de su país, buena recepción crítica y el pedigrí que siempre da premiar cine iraní), y al final acabó ganando Anora, que simplemente había gustado más. Aunque quizá el perfil de los miembros del jurado de este año juega también a favor de Panahi.