Extracto de la crítica de El País:
"Cómo objetar algo a Melody. Cómo poner pegas a alguien con la moral tan vitalista. ¿Vieron cómo ejecutó su ya popular helicóptero con la melena al final de su actuación? Cómo no apoyar a una persona que inspira afecto y sencillez en un entorno, el artístico y sus aledaños, repleto de personajes afectados. Vivimos su lenta, y por eso titánica, escalada en las apuestas durante las semanas previas. Al final fue todo un espejismo. Esa diva quedó mal, en el puesto 24, el antepenúltimo, con una canción anticuada y pespunteada de españoladas topiconas [...]
Defendió bien su tema la sevillana, con ardor y disciplina, con mejoras evidentes desde su victoria en enero en Benidorm Fest, como el efecto de cambiar de estilismo para salir de un telón con ese body de pedrería en plata que ya forma parte de la cultura pop española reciente. Que iba a cantar con solvencia había pocas dudas, que bailaría con vehemencia andaluza estaba asegurado. Existía temor sobre si se descoyuntaría en la voltereta final, pero aguantó ella, y el bailarín, que nos pareció ver que tenía el miedo dibujado en los ojos. También sabíamos las deficiencias de Esa diva, trasnochada a pesar de las mejoras, desfasada en algunas partes y simplona en otras. Una canción que se mueve a bandazos sin encontrar el carril adecuado, un tema congelado en un tiempo lejano a mucha distancia de la buena música que se compone en la España de 2025. Melody bien; Esa diva, poca cosa."
Consideraciones geopolíticas aparte, que obvio las hay, estoy bastante de acuerdo. Con esos bueyes había que arar y pasó lo que tenía que pasar.