En los años 70, Marina Abramovic mantuvo una intensa historia de amor con Ulay. Pasaron cinco años viviendo en una furgoneta realizando toda clase de performances. Cuando su relación ya no daba para más, decidieron recorrer la Gran Muralla China, empezando cada uno de un lado, para encontrarse en el medio, abrazarse y no volver a verse nunca más. 23 años después, en 2010, cuando Abramovic ya era una artista consagrada, el MoMa de Nueva York dedicó una retrospectiva a su obra. Dentro de la misma, Marina compartía un minuto en silencio con cada extraño que se sentaba frente a ella. Ulay llegó sin que ella lo supiera, y esto fue lo que pasó.
que coñazo el vídeo este, la tía ya lo había visto días antes en su estudio solo que no le dijo que iba a ir a la permormance esta, además sale en el documental de ella
Comentarios
En serio @iFar es más facil de lo que piensas
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=7c-0iwBEswE
LOL
qué coñazo los harlem shake por cierto
Cuidado que no os piquen porque le hacen esto a la sangre
que susto
vaya flopazo la que se sienta después no?