El hecho de que esos tuits hayan desaparecido es bastante simbólico de por sí, y es que solo hay que imaginarse la presión que el entorno de Kanye West ha podido ejercer en este para que retire su apoyo a Trump. De hecho, su esposa Kim Kardashian mostraba una foto en Instagram en solidaridad con la marcha por la mujer de Washington
. Además, West no era invitado a actuar en la bienvenida de Trump porque el equipo de este prefería hacer algo «típica y tradicionalmente americano» (?).TMZ ha indicado que, según sus fuentes, ha sido la ley que prohibe la entrada a extranjeros de siete países de mayoría musulmana la gota que ha colmado el vaso para Kanye West. También especifica que la decisión de borrar los tuits ha sido solo de Kanye.