Música

Hazte Lapón / Tú siempre ganas. Parte 2. Tú y yo (y todos los demás)

Con la temeridad que inevitablemente requiere la osadía, Hazte Lapón echan el cierre marcándose una pirueta final: un disco dividido en tres partes, recogido en un formato físico inédito (su disco-libro-juego, que pronto diseccionaremos, va mucho más allá que el estético tarot de ‘El mal querer’) y que sólo tiene, que recordemos, un precedente en ‘Los diarios del petróleo’ de Chucho. Después del interludio veraniego que reunía la divertida ‘Amas la playa / Odias la playa’ y la revisión dub de ‘El desencanto’, semanas atrás, coincidiendo con la venta del falso vinilo, se presentaba la parte 2, subtitulada ‘Tú y yo (y todos los demás)’, que Lolo Lapón nos explicó que pretendía hacer extensiva a los múltiples músicos que han formado parte del grupo en esta década la temática centrada en la relación sentimental de él y Saray Botella, la otra miembro permanente de Hazte Lapón.

Esta última parte supone una extensión de lo que ya era “La vida adulta (instrucciones de uso)”: un compendio de pop de arreglos exquisitos que no pocas veces obligan a mentar a Belle & Sebastian y que, en sintonía con proyectos como The Magnetic Fields (la bonita guitarra distorsionada en ‘Todas las fiestas’ nos traslada del todo a ‘The Charm of the Highway Strip’) o Klaus & Kinski, encuentran refrescantes remansos de variedad de estilos. Indistintamente pueden ir de ritmos clásicos, como el vals de ‘Catalizadores de amor y ‘Maravillas de la insuficiencia’, la fanfarria de ‘Sorprendido del truco’ o los toques doo wop de ‘Trompe-l’oeil’, hasta el indie rock enérgico –a lo The Wedding Present– de ‘Vidas de santos’ o el kraut pop a medio camino de Pulp y LCD Soundsystem –pero en orgánico– del enorme final ‘Yo los he visto

’.

Un conjunto que, en esta ocasión, contiene muchos más cortes reposados y que, quizá a causa de su secuencia, se revela algo más “difícil” que su primer volumen. Pero que, como aquella, va creciendo con las escuchas, especialmente cuando se va prestando atención a las numerosísimas y no evidentes referencias a personajes y obras tan variopintos como Andy Warhol y The Velvet Underground, Leopold y Molly Bloom, Wes Craven y Werner Heisenberg o William Masters y Virginia Johnson. El malagueño se vale de todos ellos para crear pequeños relatos y paradojas que en realidad reflexionan sobre su propia relación con Saray, sobre su hijo, sobre la muerte, sobre la creación artística en estricta oposición a una vida normal, el ego, el sexo… Cuestiones filosóficas que, convertidas en cuidadas piezas de pop atemporal (el trabajo de Ferrán Resines y Cristian Pallejà en los Estudios Caballo Grande, fieles escuderos y productores en este último lanzamiento, sigue siendo fantástico), ayudan a tragar la píldora e invitan a tomar nuestra propia posición. A bote pronto, no logro recordar que haya ningún otro proyecto de la escena indie –la que los acogió e hizo crece y que, vista su deriva, han decidido dejar marchar– que haya sabido manejar su adiós así de bien y poner cierre a una etapa con tanta dignidad y clase como Hazte Lapón. Sólo por ello se merecen una ovación cerrada y un recuerdo eterno.

Calificación: 7,8/10
Lo mejor: ‘Yo los he visto’, ‘Vidas de santos’, ‘Todas las fiestas’, ‘Tú siempre ganas’
Te gustará si te gustan: Klaus & Kinski, The Magnetic Fields, Belle and Sebastian, Pulp
Escúchalo: Spotify

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Publicado por
Raúl Guillén
Tags: hazte lapón