Preguntada por si trabaja en un nuevo disco, la cantante californiana responde: «Las canciones de cada álbum hablan de una época concreta (de mi vida). Mi último disco era el que representaba la parte más fluctuante de mi vida, y fue una montaña rusa de emociones. Con el próximo disco el enfoque está puesto en la salud mental, en la verdadera felicidad y en el camino para llegar hasta ahí».
Con estas declaraciones, Perry confirma también lo que ya había expresado en las letras y dirección artística de ‘Witness’, que aquella fue una etapa de crisis en su vida. De hecho, hace poco se sinceraba sobre la depresión que sufrió durante esta época.