Según cuenta Bad Gyal a JENESAISPOP en una entrevista de próxima publicación, ninguna chica quiso hacer el remix de ‘Zorra’ que finalmente sacó con Rauw Alejandro, y solo después de sacarlo se enteró de que a Karol G le hubiese apetecido (¿os imagináis?). Esto tiene especial relevancia porque entre sus seguidores dicho remix desató bastante polémica: por sacarlo más de un año después del lanzamiento de la original, por sacarlo con él en lugar de con una mujer, y porque encima su aportación cambia completamente el (poderoso) significado de la canción. Por otro lado, lo está petando. Y seguramente muchos de los 34 millones de oyentes mensuales de Rauw conozcan a Bad Gyal a través de esta canción. Está incluido en ‘Warm Up’, sintiéndose súper forzado y siendo con diferencia la peor canción del disco, pero comercialmente le va a venir de puta madre.
Si a esto de colaboraciones centradas en los streamings le sumamos la corta duración de los temas (ahora es curioso que ‘Blink’, su canción más larga, fuese el lead single de ‘Worlwide Angel‘), o el empeño de Alba por simplificarlo todo (como ella misma cuenta) lo que se ve en muchos momentos de ‘Warm Up’ es una lucha entre la frescura en composición y producción, versus las decisiones encaminadas a “hacerlo hit”. ‘Pussy‘ me pareció en primera escucha uno de los temas más random que ha sacado… pero hay que darle la razón porque, aunque sigue sin gustarme del todo, ya lo tengo taladrado en la cabeza. “Cuando tú me escuchas se te queda en loop”, como dice en ‘Iconic’, otro de los temas inéditos y al que le pasa un poco lo mismo: es eficaz (y además muy divertido), pero deja la sensación de “¿ya está?”. Aunque pueda sonar a lugar común, se echa de menos la esencia que sí tenían ‘Slow Wine’ y ‘Worldwide Angel’, y que aquí está más dispersa por el intento de que todo sea un hit. Algo que seguramente ocurra.
Pero hay excepciones a esta pérdida de frescura. Una de ellas es ‘Aprendiendo el sexo’, que no puede sonar más a la Bad Gyal de los inicios, y a su vez a la evolución que ha tenido en aspectos como la producción y la duración. “Bebé, parece que nos hemos tirao media vida / aprendiendo el sexo / conmigo hace cosas que antes no hacía / y yo con él lo acepto” recuerda al lado más soft que tenemos en ‘Más raro’, ‘Turn Me On’, ‘Tu moto’ o la mismísima ‘Fiebre’, rápidamente viene “está duro tol día” para compensar, y además añade dos nuevas perlas a su repertorio como son “la pedicura blanca con pedrería / le gustan los pies y qué rico lo hacía” y “tu bate y mi toto son lead y armonía”.
’44’ con el nigeriano Rema (que viene de arrasar con ‘Dumebi’ o ‘Corny’), que a priori no llama tanto la atención, es un auténtico grower, y en unos días os encontraréis cantando “y a ti te da miedo que me guste otro / eres el único con el que voy down-low”. Supone sin duda LA colaboración de este disco: ‘Judas’, con el aún-más-exitoso-que-Rema KHEA, resulta quizás algo más simplona (aunque podría dar la sorpresa este verano), y sigo pensando que ‘Blin Blin’ sería más temazo (de lo que ya es) metiendo tijera en la parte de Juanka. ’44’, que funciona en todo lo que el remix con Rauw pincha, es además una vieja conocida para los fans de la cantante, por su aparición en uno de los pocos shows que pudo hacer el año pasado.
“Cuando entro en el party, una energía rara” canta en ‘Gasto’, que es otro punto alto del disco, especialmente por lo bien que le sienta a la chulería de Alba una producción más oscura de lo habitual. Según nos contó es una co-producción de El Guincho, pero nos dice que es de Soto Asa y nos lo creemos perfectamente: tanto la atmósfera opresiva como ese interruptus del estribillo (“al nivel que (gasto) / al nivel que yo gasto”) suenan 100% al autor de ‘Coupé’. En definitiva, ‘Warm Up’ es un EP que seguramente cumpla su cometido a nivel comercial, y que artísticamente es más un camino distinto que un traspiés, pero con el que la sensación general se parece a la que deja el empeño de Bad Gyal en acortar y simplificar las canciones: nos quedamos con ganas de más, sí… pero también sentimos que podría haber dado mucho más de sí.