Este domingo se ha disputado la final de la UEFA EURO 2020 en el Wembley Stadium de Londres. La competición ha dado por ganadora a Italia tras un empate de 1 a 1 contra Inglaterra -que jugaba en casa- que se resolvía en la tanda de penaltis, resultando en un 3 a 2 a favor de Italia. Es la primera vez que Italia gana la Eurocopa desde 1968. Y como ya informa La Vanguardia, también es la primera vez que Italia gana la Eurocopa y Eurovisión el mismo año. ¿Se ha acabado ya la homofobia?
2021 está siendo a todas luces el año de Italia, para bien y para mal. Empezamos por lo malo para recordar que este año nos han dejado dos grandes de la música italiana. Con menos de dos meses de diferencia hemos tenido que despedir a Franco Battiato y a Raffaella Carrà, dos artistas casi igual de distintos como lo son el fútbol y el festival de la canción, pero que tenían varias cosas en común: Battiato pasó varias veces por el programa de Raffaella pero, además, ambos guardaban una estrecha relación con España en lo profesional y también con Eurovisión: Battiato concursó en el festival en el año 1984 y Raffaella presentó el programa ‘Salvemos Eurovision’ en 2008. En esta vieja entrevista, Raffaella habla con Battiato y Alice tras su paso por el evento.
Y para bien porque Italia ha ganado la Eurocopa y también porque su victoria en Eurovisión está llegando muchísimo más lejos de lo que nadie podría haber imaginado. Ya hemos comentado que Måneskin es el mayor fenómeno eurovisivo desde ABBA y que el público se está enganchando a su música hasta el punto de que ‘ZITTI E BUONI’, la canción ganadora, ni siquiera va a ser la más popular de su repertorio a la larga. A día de hoy, ‘I WANNA BE YOUR SLAVE’ supera las reproducciones de la primera en Spotify y, más sorprendente todavía, su versión de ‘Beggin’ es número 1 en el top 50 global de Spotify por delante de Olivia Rodrigo, BTS, Justin Bieber y Ed Sheeran.
Por otro lado, la repercusión (académica) lograda este año por Laura Pausini bien merece ser comentada aparte. Siempre ha sido muy reivindicable su repertorio desde los tiempos de ‘La soledad’ a la actualidad, cuando ha sido capaz de sacar una canción con Carlos Baute (!!!) que es una de las mejores de su carrera a pesar de que merecía una producción mejor. Pero nunca ha sido mejor momento para defender que ‘Mi respuesta’ era un buen disco, que ‘Volveré junto a ti’ era una balada maravillosa o que ‘Entre tú y mil mares’ sigue poniendo la piel como escarpias como el día porque Pausini ha obtenido este año sendas nominaciones a los Oscar y a los Globos de Oro gracias a ‘Io si’, su canción para la película ‘La vita davanti a sé’ compuesta junto a Diane Warren. Con tantos años de carrera a sus espaldas es un logro que atesorar de por vida.
Con la música italiana tan en el mapa es imposible no prestar atención a lo que se está cociendo en el país más allá de estos dos nombres tan populares o también de Mahmood, que tras quedar 2º en Eurovisión con ‘Soldi’ en 2019 acaba de publicar su segundo álbum ‘GHETTOLIMPO’, con el que hemos tenido oportunidad de hablar con él en una entrevista que publicaremos próximamente. Hace un tiempo, Delaporte compartieron con JENESAISPOP una interesante playlist de música italiana actual a raíz de que uno de sus integrantes es italiano, en el que encontrábamos temas de Cosmo, LIBERATO, MYSS KETA, Lorenzo Senni, Clap! Clap! o Iosonouncane. Hoy cabe ahondar un poco más en las playlists «indie» de Spotify para descubrir el interesante electropop de La Rappresentante di Lista (foto), el buen indie-pop de sveliaginevra, la canción clásica de Fulminacci, el pop experimental de GINEVRA, el drama pop de PSICOLOGI, el hip-pop soleado a lo Lily Allen de Laila Al Habash o el pop-folk con ecos a Arcade Fire y Of Monsters and Men de Fast Animals and Slow Kids.
Al margen de la música, las victorias de Italia en Eurovisión y en la Eurocopa sirve para poner sobre la mesa una diferencia importante. Y es que Eurovisión no suele ser noticia por dar pie a discursos de odio como sí lo ha hecho la Eurocopa, que es noticia también tras los insultos racistas propinados por el público a algunos jugadores ingleses durante los penaltis. Eurovisión, cuya audiencia es enormemente queer, es sinónimo de igualdad e inclusión. En la misma semana en que hemos estado sumergidos en el atroz asesinato de Samuel Luiz a la vez que se ha disputado la Eurocopa, que dos eventos tan multitudinarios converjan ahora en sendas victorias para Italia da que reflexionar sobre el estado de las cosas. La música y el fútbol parecen representar dos maneras de ver el mundo y en la primera la violencia nunca tiene cabida. Con medio mundo pegado a la televisión para ver a dos equipos de jugadores patear un balón, ya podríamos aprender todos un poco más de Eurovisión.