Fangoria / El paso trascendental del vodevil a la astracanada

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Fangoria / El paso trascendental del vodevil a la astracanada

Quien no sea experto en subgéneros teatrales de la historia de España o en las últimas tendencias de la electrónica internacional puede encontrar en la misma web de la RAE qué es eso de «astracanada» que aparece en el título del primer recopilatorio que merece la pena de Fangoria (en el libreto interior arremeten contra la «continua reedición de canciones en recopilatorios desaliñados, destinados a amortizar el fondo de catálogo de las compañías discográficas dueñas del material»). Una astracanada no es sino una «farsa teatral disparatada y chabacana».


Dicen Fangoria en el DVD ‘Entre bambalinas’, uno de esos «cómo se hizo» de más de dos horas que suelen incluir en sus cajas especiales, que son conscientes de haber perdido a sus antiguos fans porque para éstos ahora suenan demasiado «amateur». Pero incluso para los que ahora se espanten de que Alaska declare que no le gustan Single después de haber cantado con Le Mans (sí, sí lo ha dicho), el CD 1 de este recopilatorio es uno de los mejores que ha dado el pop español, superando la sucesión de singles (con perdón) de los mismísimos Dinarama, que al fin y al cabo sólo estuvieron en activo seis años y sacaron cuatro discos.

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Impresiona escuchar ‘En mi prisión’, ‘Sálvame’, ‘En la Disneylandia del amor’, ‘Electricistas’ y el resto de temas compuestos por Lucho para la era Subterfuge, ‘Retorciendo palabras’ o incluso los extraidos de ‘El extraño viaje’ y el malogrado ‘Absolutamente‘, que no se cansan de reivindicar como el punto álgido creativo (?) y comercial de su carrera, a pesar de ser su primer álbum en no lograr el disco de oro desde 1999. Buena noticia, en cualquier caso, que según el DVD, ‘La pequeña edad de hielo’ esté llamada a ser la canción que inspire su próximo álbum de estudio de cara a 2012 ó 2013.

Entre momentos intimistas y festivos, el primer disco alcanza fácilmente la categoría de sobresaliente, a pesar de los «radio edits», a la altura de un ‘Immaculate Collection’; mientras el tercero ofrece alguna curiosidad bastante interesante como el dúo con Paco Clavel o la versión de ‘Branquias bajo el agua’ (se echa de menos ‘La lengua asesina’, que parece haber estado a punto de entrar según algunos tracklists que han circulado por internet). El problema viene en el CD 2, cuando Fangoria revisitan el repertorio de Dinarama y Pegamoides, en concreto todos sus éxitos excepto ‘Horror en el hipermercado’, y alguna personal favorita como ‘Isis’ (lástima que no se hayan animado con ‘Sacerdotisas de Baal’, que tanto juego les dio en vivo alrededor del año 2000).

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Ningún pero al concepto, defendido con considerable credibilidad: Fangoria nunca han dejado de tocar ‘Rey del glam’, otras como ‘Mi novio es un zombi’ han aparecido esporádicamente en su repertorio y es verdad que ahora y no antes es cuando ha llegado el momento en que pueden actuar en un pueblo sin depender de viejos hits (de hecho juraría que en las recientes interpretaciones de ‘Descongélate’ hasta la capital, su principal sede de fans, se aburre). El problema que se encuentra el público exquisito es que las nuevas versiones apuestan por ese escacharrado sonido de glam electrónico con el que Nacho Canut pretende distinguirse de producciones actuales que le gustan pero a las que no se quiere sumar, como las de «David Guetta, Stuart Price o los mismos Pet Shop Boys con Xenomania». Quedan, por supuesto, al margen, otras posibilidades.

Paradójicamente, es Carlos Jean, cuyas propuestas para ‘A quién le importa’, ‘Ni tú ni nadie’ y ‘Cómo pudiste hacerme esto a mí’ han sido rechazadas por el grupo, quien ofrece las versiones de dance más sofisticadas, a los mandos de ‘Bailando’, que ya fue revisitada con bastante gracia en ‘Diez’; y ‘Un hombre de verdad’. Fangoria, como productores, han añadido un sencillo pero efectivo piano al puente de ‘A quién le importa’ y Spam brillan sobre todo en ‘La tribu de las chochoni’, grabada de nuevo con McNamara, autor de la letra, gracias a un sonido funky y acid cerca de los actuales Chromeo o de los mismos remixes de ‘Fan fatal’.

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Los cinco temas producidos por Sigue Sigue Sputnik (los que pensábamos inéditos este verano), se mueven entre la indiferencia total (‘Otra dimensión’) y lo insólito (¿qué aportará el final hablado de ‘Perlas ensangrentadas’?), redondeando el título del CD 2. Alaska y Nacho siempre han sido muy listos y, si esto es lo que les apetece hacer, están sabiendo venderlo como un todo que se antoja perfecto para posibles interpretaciones kitsch y caspa: impresionante caja con diseño tipo revista española y concierto de presentación en La Latina, que sitúa al grupo donde estuvo en sus mejores momentos, bien para unos, en lo peor para otros, pero siempre a lo suyo.

Calificación: 7/10
Lo mejor del CD1: ‘Retorciendo palabras’, ‘Electricistas’, ‘En la Disneylandia del amor’, ‘No sé qué me das’
Lo mejor del CD2: ‘Bailando’, ‘Un hombre de verdad’, ‘La tribu de las chochoni’
Lo mejor del CD3: ‘Basura’, ‘Nada es lo que parece’, ‘Branquias bajo el agua’
Lo mejor del DVD: ‘Sálvame’, ‘Hagamos algo superficial y vulgar’, ‘No sé qué me das’
Te gustará si te gustan: el buen pop (CD1), los remixes de Pumpin Dolls de la Pantoja (CD2)

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