Los que defendíamos ‘Crazy For You‘, debut de Best Coast, a pesar de sus carencias, teníamos en su sonido amateur y el ruido de sus guitarras uno de nuestros mejores argumentos, el picante que le ponían a sus almibaradas melodías 50s. En su segundo álbum, en una decisión inesperadamente valiente y loca, dejan de lado la inmediatez de aquel lo-fi para abrazar un sonido limpio y pulido, lo cual nos lleva a pensar que, más que un posicionamiento estético, se trataba de una ausencia de mejores recursos.
Despojados, pues, del punto cínico que el ruidismo aportaba a esas melodías tan bubblegum, se antojaba difícil encajar este ‘The Only Place’. Sin embargo, vuelve a demostrarse que, en el pop, las canciones están por encima de cómo estén vestidas. Bethany Cosentino y Bobb Bruno, sin perder la inmediatez que caracterizaba temones como ‘Boyfriend’, ‘Crazy For You’ o ‘Our Deal’, han realizado un esfuerzo por mejorar sus composiciones, mucho más trabajadas, e introduciendo en su sonido, eminentemente 50s y duduá, aquellos guiños country que habían anticipado. Y también queda patente que Beth, por su parte, no solo ha empleado su tiempo en diseñar ropa: se nota que se ha formado como cantante, sacándose partido sin necesidad de recurrir a gorgoritos.
Jon Brion (Kanye West, Of Montreal, Elliott Smith), con el que Bobb había trabajado como ayudante, ha realizado con ellos un trabajo de producción exquisito, limpiando y matizando el sonido pero sin apenas recurrir a su especialidad, los arreglos de teclados, cuerdas y vientos, que posiblemente hubieran desfigurado demasiado la esencia del grupo. Así, ‘The Only Place‘, ‘Why I Cry’, ‘Let’s Go Home’, ‘Do You Still Love Me Like You Used To’ o ‘My Life’ muestran que aún poseen la misma capacidad evocadora para trasladarnos mentalmente a la California soleada y playera. Especialmente, cuando gran parte del álbum versa sobre la profunda morriña de su hogar que Beth sufrió durante las largas giras de presentación del primer álbum.
‘The Only Place’ es por eso un álbum aún más melancólico y nostálgico que el precedente, compuesto durante esos tours que Cosentino ha confesado que se le hicieron realmente duros y que nunca llegó a disfrutar totalmente, lo cual se refleja en una mayor profusión de baladas y medios tiempos. Este tipo de composiciones aportan cierto dinamismo al álbum, e incluso llegan a resultar brillantes (pienso en ‘How They Want me To Be’), pero a tenor de cortes bastante anodinos como ‘Last Year’, ‘No One Like You’, ‘Dreaming My Life Away’ o ‘Better Girl’, que no están a la altura del resto.
Algo que no ha cambiado es la débil capacidad lírica de Cosentino, que aunque personalmente justifico por ajustarse a un estilo musical fácil y ligero, reconozco que hay ocasiones que resulta sonrojante (ese «we have fun / we have fun / we have fun» del tema que abre el álbum remite, directamente, a Rebecca Black). Pero también en ese aspecto muestran algunos signos de mejora, que se concretan en la bonita ‘Up All Night’. El corte que cierra el álbum destaca, además, por ser el que mejor condensa las virtudes de los nuevos Best Coast, y su trabajado crescendo, cuerdas incluidas, apunta a una posible dirección para el crecimiento del dúo.
Calificación: 6,9/10
Lo mejor: ‘The Only Place’, ‘Why I Cry’, ‘Up All Night’, ‘Do You Still Love Me Like You Used To’
Te gustará si te gustan: el segundo de Dum Dum Girls, The Shangri-La’s, Dolly Parton
Escúchalo: Spotify