‘El libro de las cosas nunca vistas’ (Michel Faber)
Uno de los acontecimientos literarios del año. El gran Michel Faber (‘Bajo la piel‘, ‘Pétalo carmesí, flor blanca’) vuelve (y, según ha declarado, parece que por última vez) con una ambiciosa historia de ciencia ficción «realista» a medio camino entre Stanislaw Lem (‘Solaris’, ‘Ciberíada’) y Douglas Adams (‘Guía del autoestopista galáctico’). ‘El libro de las cosas nunca vistas’ (Anagrama) se puede leer de dos maneras: como la apasionante odisea espacial y lingüística de un misionero intentando llevar la palabra de Dios a los habitantes de un planeta que está siendo colonizado por una gran corporación terrestre, y como la dolorosa historia de amor, epistolar e interplanetaria, entre un hombre y una mujer separados por una distancia sideral. Faber, quien escribió la novela mientras su mujer agonizaba a su lado por un cáncer («Cuando en una pareja uno tiene cáncer y el otro no, es como vivir en planetas diferentes»), ha creado una de las metáforas más brillantes y emotivas jamás leídas sobre conceptos como la incomunicación, el egoísmo, la dependencia emocional y el dolor de la pérdida. Amén.
‘Departamento de especulaciones’ (Jenny Offill)
46 fragmentos de una cronología de una pareja. Así, parafraseando el título de la película de Haneke, podríamos denominar la última novela de Jenny Offill. ‘Departamento de especulaciones’ (Libros del Asteroide) narra, desde el punto de vista de la mujer protagonista, la vida de una pareja en 46 pequeños capítulos: desde que se conocieron en Nueva York y «especulaban» sobre cómo sería su futuro, hasta que se casaron, tuvieron un hijo y el futuro les atropelló. Y lo hace sin estridencias, sin dramas; con una precisión, una ternura y un lirismo conmovedores. Offill estructura su minimalista relato a base de fogonazos, de parpadeos elípticos a través de los cuales la narradora desliza una impresión, describe un sentimiento, transcribe una cita o susurra una reflexión. «Aquel chico era tan guapo que lo miraba mientras dormía. Si tuviera que resumir lo que hizo conmigo, diría lo siguiente: hizo que yo me pusiera a cantar todas las canciones malas que sonaban en la radio. Mientras me quiso y cuando dejó hacerlo». Y así todo el libro…
‘Internet Safari’ (Noel Ceballos)
No es este el ensayo más lúcido y penetrante que podrás leer sobre las transformaciones sociales que ha generado la aparición de Internet y, en especial, las redes sociales. Pero sí uno de los más amenos, divertidos y adictivos. Tanto que te puede pasar lo que a mí: leértelo de una tacada en una tarde tonta. ‘Internet Safari’ (Blackie Books) es una expedición, en primera persona y a nivel usuario, al corazón de esa selva digital en la que todos estamos metidos. El periodista Noel Ceballos se interna en ella no con el machete del apocalíptico ni con el gps del integrado, sino como ese viajero inquieto e ilustrado que no para de hacer(se) preguntas sobre todo lo que ve y experimenta. Un libro para leer con una mano mientras con la otra vas tuiteando y contestando whatsapps.
‘Tiempos de hielo’ (Fred Vargas)
Una de las novelas negras más aplaudidas del momento. O «novela de enigmas», como le gusta calificarla a su autora, la arqueozoóloga, medievalista y reina del género policíaco en Francia, Fred Vargas. Esta nueva aventura del comisario Adamsberg y sus peculiares acólitos (un narcoléptico, una forzuda, un tipo con el pelo bicolor, un comandante y wikipedia humana…) nos lleva por dos caminos distintos pero igual de misteriosos: una trágica expedición a una remota isla de Islandia y un selecto club de admiradores de Robespierre que se reúnen para montar recreaciones históricas de «la Terreur». Personajes muy bien construidos, diálogos ágiles y afilados como una guillotina, tramas increíbles pero ciertas («fantástico-criminal» lo llaman) y, como siempre, una entretenida lección de Historia. ¿Para cuándo el siguiente?
‘La mucama de Omicunlé’ (Rita Indiana)
«Es buenísima». «¿De qué va?». «Eh…» Cuando de una novela no eres capaz de extraer una sinopsis coherente, casi seguro que está bien. O por lo menos, será sorprendente. Ésta lo es. La dominicana Rita Indiana lleva más de una década siendo una de las voces más singulares de la escena artística caribeña. Tanto su música, un electro-merengue realmente adictivo, como su escritura, con títulos de culto como ‘La estrategia de Chochueca’ o ‘Papi’ (y sin olvidar su activismo LGTB), la han convertido en un referente para la cultura latinoamericana más dinámica y underground. En ‘La mucama de Omicunlé’ (Periférica), Indiana construye un personalísimo artefacto narrativo lleno de giros imposibles, donde mezcla pasado, presente y futuro, y combina temas como la santería y la política ficción, los bucaneros y la reasignación de sexo, o el arte contemporáneo y las catástrofes ecológicas. Pero, ¿de qué va? Eh…