Según informa Pitchfork, Thomas Fekete, guitarrista de la banda norteamericana Surfer Blood, falleció la pasada noche a raíz de una complicación en el cáncer que padecía desde hace ya tiempo. Apenas tenía 27 años. La banda promovió una gira para recaudar dinero para su tratamiento, siendo noticia en su día el asalto a su furgoneta y el robo de la recaudación en metálico obtenida. Fekete grabó y publicó tres estupendos discos de noise rock luminoso (‘Astro Coast‘, ‘Pythons‘ y ‘1000 Palms‘) con su banda, cuya continuidad está en el aire.

La esposa del joven músico ha informado de su muerte a través de la plataforma GoFundMe, con la que estaban recaudando donaciones para el tratamiento de Thomas. Este es el sobrecogedor texto completo:

«Nuestro dulce Thomas falleció la pasada noche, durmiendo tranquilamente, cogiendo mi mano. Con un último suspiro, se liberó de la carga de dolor y sufrimiento que tan valientemente había soportado durante tanto tiempo. Me llena de calma saber que ahora ya es libre, y anhelo el día en que me reúna con él.

Llevemos todos el legado de Thomas siendo la mejor versión de nosotros mismos por el resto de nuestros días, y hagamos todo lo que podamos por ayudar a otros en su honor. Si nos esforzamos por ser la mitad de lo que Thomas era, haremos de este un mundo mejor.

Planeo ser anfitriona de una celebración de su vida aquí en la playa de Florida del Sur, el primer fin de semana de julio, justo después de su cumpleaños. Compartiré detalles específicos tan pronto como pueda. Invito a todo el que llevara a Thomas en su corazón a que, por favor, se unan a mí en su celebración.

Fue un absoluto privilegio permanecer al lado de Thomas y hacer frente a este monstruo. Incluso cuando su cuerpo le falló, su mente y espíritu siguieron luchando. No hubo ni un día en el que no estuviéramos llenos de esperanza. Nunca hubo un día en el que él considerara arrojar la toalla. Fue el corazón amable, divertido, intrépido, el magnético rayo de luz que todos conocisteis de él hasta el mismísimo último aliento.

Thomas John Fekete, te amo y vivo por ti. Nada me hará más orgullosa que haber podido llamarme tu esposa.

Ahora, mi hermoso ángel, busca a Bowie y toca con él».