Britney Spears continúa actuando como residente en Planet Hollywood de Las Vegas haciendo algunos de sus mayores clásicos, además de canciones menos conocidas de su repertorio y dos singles de su último disco, ‘Glory’. La cantante actuará en Las Vegas hasta mayo de 2017 pero se desconoce qué hará después, si extenderá la residencia un año más o la dará por concluida definitivamente. No estaría mal que saliera de gira por todo el mundo, pues las ventas de ‘Glory’ están siendo paupérrimas, pero eso es ya cosa suya.
Uno de los motivos por los que Britney actúa en Las Vegas es por la comodidad de no tener que viajar cada noche a un país distinto para actuar y la cercanía de su familia. Pero hay un motivo por el que la cantante podría abandonar la residencia: el público de Las Vegas. Las primeras filas de ‘Piece of Me’ suelen ser buenas, sin embargo, más atrás, como en casi todo concierto, el público va más a su aire y no hay que olvidar que estamos en Las Vegas y una gran parte del público de Britney ni siquiera es fan.
Esto le quedó claro a Britney anoche cuando actuó ante un público de lo más desganado (una noche mala, ¿no?). La situación fue tal que Britney se cabreó y pidió claramente a su público que «levantara el puto culo» antes de introducir a su banda de bailarines al final del show. «Gracias», apostilla Britney en el vídeo, con un tono de irritación notable. Antes de eso, en la actuación anterior de ‘Till the World Ends’, Spears se dirige al público con una petición: «os reto a que os quedéis sentados». ¿Tan aburrido se está volviendo el público de Spears?