Con la temporada taurina en pleno apogeo (en Madrid, mismamente, estamos con la Feria de San Isidro en plena ebullición, con los abonos en la reventa a 3000 eurazos), la asociación AnimaNaturalis envió ayer una convocatoria a la prensa de lo más peculiar. En ella se citaba a los medios a acudir a una protesta antitaurina que habría tenido lugar a las 12 del mediodía de hoy jueves 8 de junio en la Rambla de Canaletas, y cuyo cénit sería (glups) la puesta de unas banderillas en uno de los activistas para demostrar lo doloroso que es para los animales.
Toda protesta contra ese supuesto «arte» del toreo -que no es más que una tortura gratuita e innecesaria a unos animales que, además, son rematados como buenamente se pueda y si hacen falta diez estocadas pues se dan- me parece muy necesaria y más en el siglo XXI, cuando se ha demostrado que hay entretenimientos menos crueles que martirizar a un toro hasta la muerte, pero lo del acto de hoy supera todas las expectativas. Después de toda la tarde buscando información de la protesta en Internet y de haber preguntado a varios habitantes de Barcelona, no hemos conseguido averiguar si le han puesto las banderillas al miembro de la Asociación, si los loqueros se los han llevado a todos, si el activista está ingresado o si una Asociación Pro Derechos Humanos ha reventado el acto. Por favor, si alguien nos pudiera informar de algo, se lo agradeceríamos eternamente.
Si alguien quiere asistir a otra protesta, aquí no sólo encontrará la cita (domingo 25 de junio frente a la Monumental de Barcelona) sino que se puede hacer una idea de cómo habría quedado el activista víctima de las banderillas.