La recesión aguza nuestro ingenio para intentar que gastes menos en ropa pero que sigas disfrutando de la moda. De esta premisa parte la iniciativa The Uniform Project, que quiere recoger fondos para una ONG de una manera muy original: siete copias de un único modelo de vestido (una para cada día de la semana) y todos los complementos y prendas del mundo para que siempre parezca diferente. A lo largo de 365 días -terminan en mayo del año que viene- quieren conseguir estilos completamente distintos con la base de un anodino vestido gris como de uniforme de colegio, y de momento van por buen camino. Nosotros no te podemos ofrecer estilismos para un año por falta de tiempo y de espacio, pero sí algunos bastante interesantes con dos eternas prendas de temporada, la camisa de rayas y la falda de tubo.

La camiseta de rayas marineras es una de esas prendas eternas que nunca pasan de moda, aunque unas veces están más de actualidad que otras. Últimamente, con la explosión Chanel, está hasta en la sopa, y no hay gran cadena que no tenga unas cuantas versiones -manga larga, corta, tres cuartos, entallada, oversized…- en su haber y por poquitos euros. Desde luego que esta pieza es una de las más versátiles que podamos encontrar a pesar de lo sencilla que es.

Para Refinery 29 es «the perfect outfit», y es que esta combinación de camiseta marinera con el bajo corto, pantalón caqui y castellanos no puede ser más sencilla y resultona. Quizá un poco veraniega con el bolsito de paja, pero con una americana azul oscuro es ideal para ir a trabajar. La misma prenda adquiere una imagen algo más sexy si la metemos por dentro de un vaquero con la cinturilla alta.

Pero hagamos un plan de ahorro total: una pareja de chico y chica que se compren una misma camiseta oversized de rayas. Él la puede lucir con pitillos o por dentro con unos chinos en una imagen más alternativa. Cuando él no la esté utilizando, ellas pueden llevarla como mini vestido, o también sobre una mini de tubo y con americana. ¿Qué tal darle otro aire con un chaleco?

Sin lugar a dudas, la falda de tubo ha llegado para no irse jamás, de ahí que la hayamos elegido también para que forme parte de este peculiar «proyecto uniforme» que te proponemos. En cualquier tienda de moda existe en todo tipo de colores y estampados, pero es la clásica negra la que nos va a servir de muestra por lo camaleónica que es.

Por supuesto, el look secretaria ladylike es el primero que nos viene a la cabeza al pensar en cómo ponernos la también llamada falda lápiz. Ya sabes, con la camisa blanca impoluta escrupulosamente colocada por dentro. La actriz Hayden Panettiere nos enseña aquí distintas variaciones de esta imagen tan formalita en blanco y negro.

Si simplemente cambiamos el top incoloro por uno estampado y de un tejido más lujoso como la seda, obtenemos un look mucho más festivo. Incluso si mantenemos la camisa blanca pero con un diseño más actual con hombreras y llevamos una cartera en la mano, obtendremos la imagen perfecta para una fiesta que no requiera mucha pompa. Con un corpiño negro superpuesto te fabricas un vestido, y con un cinturón ancho estampado le das otra vuelta a esta prenda.

La camiseta también casa bien con la falda lápiz, aunque tenga un aspecto un poco cutre; lo arreglas con unos zapatos y un bolso adecuados. También te puedes quitar la pinta de secretaria con unas bonitas medias decoradas o cubriendo el top que lleves con una inteligente combinación de foulard y cadenas. Por supuesto la americana oversized con hombreras te dará el toque hipster. Por último, el homenaje a Lady Gaga poniéndonos la falda de tubo con un top. Esto último sólo para verdaderos fans de la cantante, ¿eh?