‘Año santo’, el segundo disco de Triángulo de amor bizarro tras su enorme debut, que terminó logrando una posición destacada en nuestra selección de discos de la década, ha tardado en llegar. A Rodrigo y a Isa les ha costado dos años y un cambio de formación (batería nuevo y nuevo teclista/guitarrista) encontrar estas nueve canciones, de unos tres minutos cada una, que suenan más rabiosas todavía, cercanas a lo que se hace en The Smell y en alguna ocasión a HEALTH, y cuyas letras son tan caóticas como ellos mismos. Aunque el grupo se muestra mucho más amable y divertido de lo que parece por lo siniestro de algunas letras, Rodrigo e Isa no paran de interrumpirse y hablar a la vez cuando se les pregunta por sus cosas. Sí, la transcripción de lo que veis aquí abajo ha sido un pequeño infierno. Como sucede con ‘Año santo’, poner la grabación varias veces ha sido necesario para entenderlo del todo.
La otra vez que os entrevisté, me dijisteis que a finales de 2008 tendríais el disco, ¿qué ha pasado?
Rodrigo: «No nos salió hasta ahora. Estábamos saturados de la gira y no nos salían los temas. No es que no tuviéramos ganas de sacar disco, pero nos salía basura. Estábamos hartos unos de otros y eso te impide ponerte a ensayar y todas esas cosas. El pasado agosto o así reseteamos y empezamos de cero».
Isa: «También ha habido cambios en el grupo…».
¿A qué se ha debido el cambio de batería?
Rodrigo: «Habíamos estado juntos mucho tiempo…»
Isa: «Tienes que tener claras muchas cosas, te tiene que gustar estar en un grupo… El batería no tenía las ideas tan claras como nosotros. Es normal, unos tienen más interés que otros…»
¿Las canciones que encontramos en el disco son evoluciones de canciones que habéis ido manejando o nuevas?
Rodrigo: «Todo lo que teníamos anterior lo tiramos. De las viejas se ha quedado la del lince, que estuvo colgada en MySpace». (Nota del editor: ‘La malicia de las especies protegidas’).
¿Las desechadas cómo eran?
Rodrigo: «Hay de todo. Era… malo».
Isa: «Somos muy críticos y hacemos criba. Muchas cosas no llegan a ir adelante porque somos bastante catastrofistas. A lo mejor hay una canción que va, que va, que va, llega un cambio y yo ya sé que no va a ir a ningún lado».
Rodrigo: «Ya en el primer disco teníamos 5 ó 6 ó 7 canciones que nunca llegaron a ver la luz porque no las veíamos y no salieron ni en el disco de las rarezas».
Isa: «Nos importa mucho lo que le parece a la gente, pero nosotros sabemos lo que nos gusta y lo que pasa un filtro para nosotros».
¿Quién es más crítico con vuestro propio material?
Rodrigo: «Es una cosa colectiva».
Isa: «De todas formas, en el momento en que yo diga que no o él diga que no…»
¿Buscabais singles, temas en concreto, un concepto para el álbum?
Isa: «No podemos planificar tanto las cosas, no tenemos tanta técnica para tirar hacia un lado o hacia otro. Es lo que nos sale».
Rodrigo: «Cuando pensamos mucho las cosas nos sale basura. Ensayamos mucho, pero de repente te sale algo y ya está. Igual ahora estamos cinco años hasta que nos salga algo (risas)».
Hay un par de canciones, como ‘Amigos del género humano’ o ‘El culto al cargo’, que presentan al final un cambio importante que les da mucha intensidad. ¿Estos cambios en la estructura de la canción os surgen junto a la melodía desde el principio o se os ocurren después?
Isa: «Depende, hay canciones que a la primera ves muy clara la estructura y luego hay otras que les das un par de vueltas o incluso al grabar, le das otra vuelta».
Rodrigo: «Damos muchas vueltas a las estructuras para completarlas y recortarlas. Queremos que estén lo más condensadas posible. A veces grabamos 40 ó 50 minutos con una grabadora y a lo mejor seleccionamos sólo un minuto».
¿A qué canción habéis podido dar más y menos vueltas?
Rodrigo: «La que más vueltas, sin duda, la primera».
Isa: «Y la que menos, la última, ‘Año santo'».
Este disco es más ruidoso que el primero. ¿Os ha influido el sonido de The Smell, el regreso del krautrock?
Rodrigo: «El disco de HEALTH del año pasado me parece lo más».
Isa: «Yo escucho mucho kraut, me gusta más que a él, que es un poco más pop. A mí me gusta mucho el pop, ¿eh?, pero es él el que tira más hacia… «lo brillante»».
Tengo la impresión de que vivís en un pequeño pueblo de Galicia y que esa sensación de aislamiento tiene mucho que ver con vuestra música y las letras, ¿es así?
Rodrigo: «Pues más o menos, sí, vivimos en una aldea pequeña, en una casa que era de mi abuela».
Isa: «Es una casa reformada, pequeña, con jardincito, parece como un sitio para pasar el verano, pero de allí no nos movemos».
Creo que no os gusta nada hablar de las letras, pero os quería preguntar un par de cosas…
Rodrigo: «Sí (se ríe), me parece muy violento ponerte a explicar… No me gusta».
Isa: «Las moralejas nunca molaron».
Buscáis imágenes concretas, con bastantes referencias políticas… ¿Tenéis imagen clara de lo que va a ir la canción, escribís ideas sueltas, según os vienen…?
Rodrigo: «Si lo de la música es caótico, lo de las letras… No sé ni cómo explicarte».
Isa: «Dadaísmo».
Rodrigo: «Escribo muchas letras, en una mañana puedes hacer 5 ó 6. Tampoco busco un concepto. Yo voy elaborando mentalmente algunas, otras voy cogiendo de los ensayos y ante todo voy quitando más versos de los que voy poniendo. Por ejemplo la primera del disco tenía dos o tres estrofas más que me gustaban bastante, pero quedó reducida al mínimo que creo que tenía sentido. Yo creo que cada una tiene un sentido, y tengo claro lo que quiero transmitir, pero tampoco lo quiero explicar. Que cada uno extraiga lo que quiera».
Dices que reduces las canciones. ¿Que el disco dure media hora era algo buscado?
Rodrigo: «Es que un disco de 50 minutos… ¿quién coño escucha eso? Antes de grabar ya sabíamos la duración del disco. Le pregunté a Marcos, del sello, si había un problema por presentar un disco de 29 ó 30 minutos y me dijo que no. Yo creo que es la duración justa».
Isa: «Yo cuando escucho un disco largo digo: «mira, relleno». No me gusta y creo que no es necesario. Hay mucha gente haciendo música».
¿Los títulos, que casi nunca son mencionados en la canción, salen después de la letra o durante?
Rodrigo: «Después, cuando está todo hecho. Cuando ya está todo cerrado, miras las canciones y las complementas con el título. Hay canciones que se entienden por el título. Es como el estribillo que no se dice en la canción».
Isa: «Siempre es muy importante».
Rodrigo, ¿dónde metes ese acento gallego tan cerrado cuando cantas?
Rodrigo: «No estoy seguro de si canto con acento».
No, me refiero a que tu voz al hablar no tiene nada que ver con tu voz al cantar.
Isa: «Él habla así, como su familia».
Rodrigo: «Si se me entiende poco cuando canto, ya ves cuando hablo. En los discos mi madre no me reconoce, se asusta, dice: «¿quién es ese?». Yo ni pienso en ello ya. Canto como en el primer disco y me sale».
A una amiga le hacen mucha gracia los «rockys» rojos que llevas en los conciertos y en muchas fotos, ¿esta temporada repetimos?
Rodrigo: «Estoy esperando que llegue el buen tiempo (se ríe). A 50 grados, como en el Contempopránea, llevar un pantalón vaquero…»
Isa: «Siendo gallegos, decidimos ir con pantaloncito corto y vestidito de playa. Rodrigo tiene ahora otros muy chulos que están ahí ya preparados para la gira. No vamos a contar cómo son porque va a ser la bomba».
¿Por qué os decidisteis por Battiato para la versión del recopilatorio ‘Peace’?
Isa: «Lo teníamos claro hace mucho tiempo, era casi una necesidad».
Rodrigo: «La íbamos a hacer para el Día de la Música del año pasado, pero al final no pudimos. Somos muy fans como artista y como todo. En el disco de ‘Nómadas’ hay 5 ó 6 que son una pasada. Queríamos hacer ‘Yo quiero verte danzar’ pero no nos salía, por ritmo y demás. Las palabras que utiliza en boca de otra persona quedarían muy mal. Es el único disco que se salvaba de la colección de discos de mi padre, entre los discos de Juan Pardo. Marcos, un amigo que escribía en nuestro blog, en la época del grunge, ya defendía a Battiato».
Ahora tenéis otro blog que es más serio que el que teníais antes, ¿no?
Rodrigo: «Sí, hemos hecho otro más corporativo».
Isa: «El otro es más nosotros, lo que pasa es que hemos sacado otro más serio porque si vas a México, la gente que te sigue necesita información y no teníamos nada. Y el otro era de escribir gilipolleces, pero, claro, es lo que nos mola. Colaboran algunos amigos, que son como hermanos, somos una secta».
Rodrigo: «Están Blas, David…»
¿Cómo habéis seleccionado ‘Rosario’, la canción que sólo va a salir en vinilo?
Rodrigo: «Nos gusta mucho pero las voces no quedaron como queríamos por la mezcla. Cantamos los dos y mi parte quedó un poquito rara».
Isa: «Somos un grupo que tampoco se puede permitir estar un mes grabando. Esta canción no pudimos modificarla. Nos dio rabia porque musicalmente nos gusta mucho. Teníamos muy claro cómo tenía que sonar, pero al terminar y escucharla, no la veíamos tan bien acabada. No la vemos tan mal, si no, no la meteríamos en el vinilo, pero no suena como queríamos. Y como tampoco queremos dejar un tema de esta época para el tercer disco…»
Creo que muchas veces se deja a Luis Cerveró hacer el vídeo que quiera con el tema que se le pasa. ¿Os ha gustado el que ha hecho para ‘De la monarquía a la criptocracia’?
Isa: «Estamos emocionados».
Rodrigo: «Pilló muy bien el concepto».
Isa: «Podría escribir en nuestro blog».