Este mes se cumplía el décimo aniversario de la muerte de Carlos Berlanga y, como prometimos, en estos días publicaremos una serie de artículos en los que recordaremos distintos puntos de su carrera, especialmente su trayectoria en solitario. Hablaremos del musical que se prepara, la edición de ‘Impermeable’ o sus contados directos, pero de momento comenzamos con una entrevista a Austrohúngaro, el sello que se molestó en reeditar ‘Indicios’, para muchos su obra maestra, cuando estaba a punto de desaparecer para siempre. Carlos Ballesteros y Genís Segarra nos cuentan que nunca pretendió ser un homenaje póstumo, sino una sorpresa para Berlanga, que era fan del sello.
¿Cómo llegó ‘Indicios’ a vuestras manos? ¿Tuvisteis que pelear por su reedición en Austrohúngaro?
«Nos dijeron que Edel, la discográfica que tenía en su catálogo ‘Indicios’, había mandado destruir todas la copias que quedaban en stock, para descatalogarlo definitivamente. Es una práctica bastante común en almacenes que necesitan espacio. Empezamos a preguntar de quién eran los derechos de ese disco, y resultó que Edel estaba a punto de vender su catálogo a Sony, y que llegábamos en el momento perfecto para conseguir un trato sobre ese disco, porque en cuanto pasara el catálogo a Sony sería muy complicado. En ese momento Carlos estaba vivo. No se trataba de hacerle un homenaje póstumo ni nada parecido. Nos parecía una injusticia que un disco así desapareciera sin más. Todas estas gestiones las hacía para nosotros gente cercana a Carlos, pero le pedimos a todos ellos que no le dijeran nada, para darle una sorpresa. Él era muy fan de Chico y Chica, y seguía todo lo que sacábamos en el sello, y creíamos que le iba a hacer ilusión».
¿Tuvisteis algún tipo de contacto con Carlos? ¿Tenéis idea de qué pensaba él de Austrohúngaro, aún en sus primeros años cuando Carlos murió?
Astrud teloneó a Carlos Berlanga en Madrid en 1998. Nunca tuvimos un trato muy fluido pero de vez en cuando llamaba a casa para comentar cosas como ‘El baile del gorila’ de Melody o similares. Nos da mucha pena que luego nos han dicho amigos comunes que él se disgustaba cuando en las primeras entrevistas de Astrud se hablaba de Fangoria y no le mencionábamos a él como referente. Por eso queríamos que la reedición de ‘Indicios’ fuera una sorpresa para él, y que viera lo importante que era para nosotros, pero al final murió antes de que lo tuviéramos todo atado legalmente.
Algunas de sus tiras cómicas sobre la modernidad me parecen una influencia para los episodios ‘4 en Alicante’ de Chico y Chica, ¿estáis de acuerdo?
Deberías preguntárselo a ellos. Que nosotros sepamos, los referentes de 4 en Alicante son muy personales.
¿Recordáis el lanzamiento del disco en 1994 con emoción o lo descubristeis algo tarde?
Ninguno de nosotros recuerda cuando salió ese disco, pero en 1995-96, cuando nos conocimos los que luego hicimos ‘Lujo y Miseria’, todos teníamos ese disco. Éramos gente muy distinta, pero a todos nos encantaba ‘Indicios’. Quizá era el único disco/artista en el que todos estábamos de acuerdo.
¿Cuáles eran o son vuestras canciones favoritas del disco? ¿Han cambiado con el tiempo?
‘Indicios de arrepentimiento’, ‘Tazas de té’, ‘Si no es por ti’… Parece un disco de singles.
Como sello, ¿qué primer single habríais escogido de ser el disco vuestro, ‘Indicios’ o ‘Si no es por ti’?
Qué absurdo. No sabemos de eso. Cualquiera de las dos.
La producción está muy equilibrada entre disco, synthpop… pero también otras áreas como la bossa. Ese eclecticismo es lo que hacía también al compositor tan grande. ¿Qué es lo que os gusta más del disco? ¿Una facción en concreto o el conjunto?
El conjunto, el todo… Tiene las mejores canciones de Carlos Berlanga, con unas letras muy finas y una producción entre comercial y sensible perfecta.
Para mí, ‘Indicios’ es mucho mejor que el primero y recuerdo el tema de ‘El ángel exterminador’ como un pequeño error para lanzar su carrera en solitario, ¿lo veis así también u os gustan los dos discos por igual?
El que más nos gusta de todos sus discos en solitario es ‘Indicios’. Aunque en todos los demás hay canciones redondas, y «El ángel exterminador» nos parece una de ellas. Es preciosa.
Se dice que Carlos era un gran autor de canciones, pero que le venía bien escribir con alguien para matizarle cosas. En este disco, a falta de Nacho Canut, escribió con Paloma Olivié, mientras el primero es de él solo, ¿creéis que fue por esa razón? ¿Creéis que ella tuvo un protagonismo relativamente importante en el disco, que le servía para relajarse más o algo así?
A Carlos Berlanga no le interesaba mucho escribir letras. Siempre había tenido a Nacho Canut para eso. Él se dedicaba a componer la música, que es lo que se le daba tan bien, pero nunca intentó hacer nada instrumental (que nosotros sepamos), por lo que suponemos que encontrar a Paloma Olivié seguramente le impulsó o le ayudó a escribir las canciones de ‘Indicios’.
¿La influencia que ha podido tener Berlanga sobre vosotros se limitaría al campo musical u os atrae su faceta de artista multidisciplinar (por ejemplo como ilustrador)?
Nos atraían por igual sus melodías y su actitud pasota. Además, compartimos con él esa pequeña aversión a lo siniestro.
¿En vuestras manos ‘Indicios’ ha sido un disco que se ha vendido bastante bien o ni fu ni fa? En otras palabras, ¿en vuestro catálogo lo consideráis fundamental o ha sido más bien una anécdota?
Económicamente no supuso nada en especial. Cuando salió por primera vez no pasó nada, y cuando lo sacamos por segunda vez tampoco. Lo normal. Sólo queríamos que el disco siguiera existiendo. En aquellos tiempos si un disco desaparecía físicamente, desaparecía del todo. De la carrera de Berlanga se puede extraer una lección: si no tocas, no existes. Por muy genial que seas, por muy Berlanga que te llames, por muy ‘A quién le importa’ que hayas escrito.
¿Habéis intentado hacer lo mismo con algún otro disco de otro artista?
¡Sí! Con los dos primeros álbumes de Espanto, que los reeditamos en vinilo el año pasado.