Se acerca Eurovisión -se celebra la semana que viene- y en pocos días publicaremos nuestro tradicional especial. De momento una de las que ha dado la campanada -literalmente, atentos a su tema- es la representante finesa Krista Siegfrids, que ha amenazado con protagonizar un beso lésbico con una de sus bailarinas sobre el escenario.
La canción ‘Marry Me’, con un guiño a Gwen Stefani y parte pseudo-dubstep, insiste en que no tiene contenido político, pero Krista reconoce que sí quiere reclamar la legalización del matrimonio homosexual en su país con esta performance. El beso llega en la parte final. 10 años después de que se prohibiera hacer lo mismo a t.A.T.u., ¿seguimos en las mismas? La respuesta, el próximo jueves en la segunda semifinal.