Los Gritos fue uno de los grupos españoles más significativos de los 60 y 70, con éxitos como ‘Veo visiones’, ‘Reiremos soñaremos’ o ‘La vida sigue igual’ (su versión del tema de Julio Iglesias, que interpretaron en el Festival de Benidorm, llegó muy alto en las listas de ventas del momento), en los que partían del clásico sonido beat de la época y comenzaron a introducir toques de soul y psicodelia hasta ese momento poco comunes. Imborrables para cualquiera son sus apariciones en el archiconocido film protagonizado por Paco Martínez Soria, ‘La ciudad no es para mí‘.
Al frente de este grupo originario de Málaga estaba Manolo Galván, que componía, arreglaba, producía e interpretaba. Poco más de un año después de la desaparición del guitarrista del grupo, Pepín Sierra, ayer, día 16 de mayo, Galván falleció a la edad de 66 años en Bella Vista (Argentina), donde residía desde los primeros 80 tras lograr allí una notable repercusión con su carrera en solitario. Llevaba retirado desde 2006 y quizá la distancia haya hecho que se haya olvidado un poco su trabajo, pero basta un rápido vistazo a sus canciones para reconocer el enorme talento de Galván.
Vía Efe Eme.