CEO ha publicado este año un fantástico disco llamado ‘Wonderland‘, que pudo ser la banda sonora perfecta del invierno y ahora la del verano. Aprovechando una visita a Madrid para pinchar hace un par de meses pudimos hablar con el esquivo Eric Berglund sobre su proceso de grabación, sobre por qué no gira, sobre meditación y sobre la separación de The Tough Alliance, entre otras cosas.
Lo primero que me llama la atención de este disco es lo que se parece en estructura al anterior: de nuevo 8 canciones, un disco corto… ¿Crees que siempre será así?
Es difícil decirlo, pero es lo natural para mí, porque creo que mis canciones son muy intensas. Son muy densas, contienen tantas emociones que no pueden ser más largas, porque sería demasiado. No grabo muchas canciones, nunca hago extras, sólo grabo las que van a ir en el álbum. Pero no estoy seguro de lo que pasará en el futuro. Intentaré hacer un disco más despreocupado, creo.
¿Sólo has grabado estas 8 canciones entonces?
Nunca grabo cosas que no voy a sacar. Sólo grabo lo que voy a sacar. No soy de grabar 20 canciones y escoger 8. Es realmente difícil hacer canciones. 8 canciones para mí es mucho.
¿Las has escrito en un corto período de tiempo?
Sí, escribir siempre es súper rápido, pero la producción y la grabación ha llevado muchísimo tiempo, 2 años, aunque con descansos porque no he querido trabajar en el disco cuando tenía ansiedad o sentía presión. Sólo grababa cuando me sentía calmado y con confianza, ya que con el primer disco sentí mucha presión.
¿Cuántas canciones consideras que tiene que tener un disco para no ser considerado un mini álbum o un EP?
No estoy seguro de que sea cuestión de cantidad, es más emocional. No sé… Supongo que siete es lo mínimo. También depende de cómo sean de largas las canciones, hay canciones de 30 minutos. Depende de cuán intensas sean.
La portada, en cambio, esta vez es radicalmente diferente a la anterior… ¿Es una reacción?
No es algo que deciciera, pasó de manera natural. Antes de empezar a grabar o incluso a escribir, veo imágenes. La otra vez veía algo muy claro y esta vez veía colores. Intento hacer con el diseño lo que tengo en la cabeza, no es exactamente una reacción, aunque quizá el siguiente disco sea probablemente una reacción, no sé…
No podría ir de gira haciendo concierto tras concierto. No estoy hecho para eso. Salir de gira tras un disco se me hace súper raro.
No eres de hacer conciertos sueltos ni mucho menos salir de gira…
Estoy intentando que no porque quiero un tiempo libre. Ahora mismo intento mantener alejada la idea porque ha sido duro hacer el disco estos dos años. Creo que me gustaría hacer un show pero soy muy perfeccionista y hacer giras es algo que se sale de tu control. Sería estresante. Y la otra parte es que estoy exhausto porque hago todo en el disco: la música, la portada, el vídeo… No puedo pensar en hacer una gira. Creo que me gustaría pero lleva demasiado. Soy muy sensible, viajar y hacer un concierto para mí es algo muy emocional. No podría ir de gira haciendo concierto tras concierto. No estoy hecho para eso. No puedo salir de gira sin más, tiene que ser porque lo sienta de verdad.
Los artistas en cambio salen de gira automáticamente con cada disco. Parece que sacan disco sólo para girar.
Sí, lo que para mí es súper raro.
Supongo que es donde está la pasta hoy en día.
¿De verdad haces dinero con las giras? Mis amigos me dicen que no. Hay tantos gastos… No sé, es una cuestión de relaciones públicas. Mi sello internacional me presiona porque te da cierta exposición. Es lo que tienes que hacer después del disco para recibir atención.
A Madrid has venido como DJ, ¿esto te gusta más?
Sí, es más tranquilo, me gusta más escuchar las canciones de otros que las mías. Prefiero poner mis canciones favoritas. Mis canciones no son mis canciones favoritas.
No me gusta internet. No me gusta buscar música porque hay un montón de cosas malas y me quita la inspiración. Sólo escucho las cosas que me mandan mis amigos.
¿Escuchas cosas nuevas o pinchas más bien cosas antiguas?
No realmente. No me gusta internet. No me gusta buscar música porque hay un montón de cosas malas y me quita la inspiración. Sólo escucho las cosas que me mandan mis amigos. Es todo demasiado… me genera ansiedad… cuando paso demasiado tiempo en internet necesito después un buen paseo.
¿Es cierto que vives en medio de la nada o es una leyenda urbana?
Sí, ni siquiera es un pueblo, es en medio de la nada, con campos alrededor.
¿Crees que tiene que ver con tu música?
Sí, creo que sí. Está bien que se perciba… Así debería ser. Hay demasiada música basada en la vida de la ciudad. Quiero que mi música sea una aventura lejos de eso. No me refiero necesariamente a la naturaleza, sino a otro lugar lejos de la vida diaria. Alguien me preguntó si creía que mi disco tenía que ser grabado en el campo pero yo creo que no necesariamente. Las cosas que siento me han hecho mudarme al campo, y querer estar en ese sitio me ha influido en todo lo que hago.
¿Qué haces en tu vida diaria? ¿Cómo es un día normal para ti?
Viajo mucho. Cuando estoy en casa medito un montón, leo, salgo a correr, trabajo… Eso es todo lo que hago.
No quiero sonar superficial, pero ¿no hay cosas que echas de menos, por ejemplo, tiendas de vinilos, salir a cenar?
Sí, quedar con amigos. Eso es lo único que echo de menos. Encontrarme amigos por casualidad. Ahora cuando veo a mis amigos es durante dos días, es todo muy intenso y me gustaría estar con ellos de manera más relajada.
‘Wonderland’ suena algo religiosa. ¿Es a propósito?
No es a propósito pero puede ser porque mi vida es así, espiritual, intento llevar la espiritualidad a la práctica. Leo mucho sobre la espiritualidad, la meditación… Eso es lo que me inspira, me motiva, cómo estar más presente, más cerca de la vida, ser más consciente de tu cuerpo y de lo que tu mente está haciendo. No es algo religioso en un sentido típico.
No te refieres a una religión concreta o hacer yoga o algo así…
Es sobre encontrar un lugar espiritual, cómo llevar tu conciencia a otro nivel.
¿A qué edad empezaste a meditar?
Creo que a los 27. Tengo 33, así que han sido 6 años.
¿Y por qué empezaste? ¿La fama no te llenaba o algo así?
No tuvo nada que ver con la fama, sólo con la ansiedad. No era consciente de todo lo que estaba haciendo. Entré en contacto con la meditación bastante al azar, a través de un amigo de mi madre. Dejó un libro en casa de mis padres, lo leí y pasó así.
¿Qué libro era exactamente?
Era una introducción a la meditación. Fue muy importante para mi vida, un punto de inflexión.
Creo que se nota en el disco…
Eso es bueno.
Volviendo a él hay instrumentales o casi instrumentales muy chulos como ‘Ultrakaos’ y ‘Harakiri’, ¿crees que la gente se detendrá en ellos?
¿Sí, de verdad te gustan los instrumentales?
Bueno, tengo mis dudas sobre ‘jUjU’, pero esos dos que te he dicho me gustan de verdad.
Me alegro. La gente se los toma como extras, cuando yo escucho mucha música instrumental, clásica, experimental. Bach, Couperin, Philip Glass, Lou Harrison… cosas así. Así que es molesto que la gente necesite letras para tomarte en serio. No sé por qué, es muy raro.
Quizá en un disco de 12 canciones, un instrumental pueda ser mejor acogido que en un disco de 8.
Ya… La gente necesita letras, pero yo quiero hacer más instrumentales. Quizá si los mezclas con canciones pop con letras, los instrumentales tienden a ser tomados menos en serio. Quizá si hiciera un disco instrumental sería de otra manera. De todas formas, hay gente a la que le gustan los instrumentales.
¿Te gusta la new-age?
No, la verdad es que no. Si te refieres a la música no.
¿Ni siquiera como adolescente, cuando era tan popular en los 90?
No. Nunca.
El disco anterior lo cerraste con un tema folk…
Sí, es un himno tradicional, de hecho es una canción cristiana que se canta cuando acaba la escuela antes del verano. Siempre ha sido especial para mí, me hacía llorar y sentía que lo tenía que versionar. ¿Cómo te suena, estando en sueco?
Suena a música tradicional, a iglesia. ¿No ha sido opción volver a repetir truco en este disco?
Sí, pensé en otra canción tradicional, otro himno, pero no estaba tan contento con el resultado. Se supone que iba a ser una cara B para el segundo single pero no la he querido sacar. No estaba perfecta para mí, pero quizá trabaje en ella para el siguiente disco.
Aunque ‘Whorehouse’ fuera el primer single, habría sido un buen contraste como cara B, teniendo en cuenta su título… Esta canción, por cierto, no habla precisamente de una «casa de putas». Es sobre criticarse a uno mismo, ¿verdad?
Es sobre criticarme a mí mismo. Es sobre mí mismo. De eso va realmente…
De tener el bien y el mal dentro a la vez.
Sí, exactamente.
¿Cómo te la jugaste con ese título que podía dar lugar a tanto error?
Fue divertido, no sé, no pienso demasiado. Sabía que la gente preguntaría, pero no puedes pensar mucho en eso porque te limitas. Mucha gente pensará que voy a casas de putas, la gente me pregunta si paso mucho tiempo en ellas en serio. Es una locura.
¿Qué te habría dicho un gran sello sobre un single así? ¿Quizá lo habrían censurado o convertido en algo que explotar?
Sí, habría habido como una reunión… no me gusta eso, no me gustan las segundas opiniones, no tiene nada que ver con el arte.
¿Estás más orgulloso de este disco que del anterior?
Creo que sí, pero no por cómo el disco suena, sino por cómo lo hice. Lo hice más por mí mismo, llevó mucho tiempo, fue muy duro, hubo presión, nervios, cuando pensaba qué pensaría la gente… Pero lo hice funcionar. Estoy muy orgulloso, pero no por la calidad de las canciones, sino por el modo en que lo hice.
¿Qué han aportado Kendal Johansson y Dan Lissvik?
Primero escribí yo solo las canciones, las maquetas más bastas. Kendal y yo grabamos instrumentos, pequeños sonidos, pequeños detalles. Luego trabajé en ello solo de nuevo y al final colaboré con Dan en un aspecto más técnico. Soy muy malo con las decisiones finales, me vuelvo loco, así que estuvo bien tener a alguien. Dan trabajó más en la calidad de sonido, que a mí no se me da bien. En eso nos enfocamos juntos, en que sonara más puro técnicamente, profesional, por decirlo de alguna manera. Lo de Kendal fue más artístico y Dan fue más como un ingeniero.
La única razón por la que me gusta más el primer disco es por el paso de ‘No Mercy’ a ‘Come With Me’, quedan muy bien juntas, me parece la cumbre de tu carrera.
Creo que fue porque fue grabado en un período de tiempo más corto. Lo grabé en dos o tres meses y este nuevo llevó dos años. Por eso quedó todo mejor junto. Esta vez ha sido más como un pequeño desorden. En el primero hay más unidad y este está más «por todas partes».
¿Te preguntan mucho por The Tough Alliance?
Sí…
Y una reunión es imposible…
Nunca diría «nunca más». No cierro puertas. No creo en cerrar puertas o en tomar decisiones sobre el futuro. Pero ahora mismo no es una opción.
¿Escuchas las cosas que produce Henning?
Mmm… no.
¿Por qué?
Porque espero que me lo mande, le he pedido que me lo mande, pero no me lo manda. Creo que es por timidez.
¿Pero tú le mandas tus cosas?
No, no me lo pide. Pero sé que lo escucha porque me ha dicho alguna cosa. Le gusta…
¿Te refieres al nuevo?
Sí… El primero fue algo «especial» porque ese disco empezó siendo como de Tough Alliance. Yo lo escribí pero estábamos produciéndolo los dos cuando decidimos dejarlo. Fue raro para él. Creo que le es más fácil escuchar el nuevo, por tanto…
The Tough Alliance durante 16 años habíamos hecho música juntos, desde los 12, así que cuando sentí que no podía hablar por los dos, las cosas tuvieron que cambiar
¿Por qué lo dejasteis? ¿Fue más algo artístico o algo personal?
Sólo puedo hablar por mí… No creo que estuviésemos tan cerca como para compartir algo tan íntimo. Durante 16 años habíamos hecho música juntos, desde los 12, así que cuando sentí que no podía hablar por los dos, las cosas tuvieron que cambiar. Es duro cambiar algo tan grande que ha sido una parte tan grande de tu vida. Fue duro pero no hubo sangre, seguimos siendo amigos, no hubo grandes discusiones, pero emocionalmente fue muy duro.
¿Qué planes tienes ahora?
No lo sé, quizá incluso toque, estoy esperando relajarme, empezar a sentir, quizá, quizá toque. Pero aparte de eso, no sé. Como he dicho sólo quiero ser capaz de ir a lugares sin pensar en terminar algo a tiempo. Necesito un tiempo de descanso. Porque este tiempo incluso cuando no estaba trabajando ha sido duro. Necesito tiempo fuera de la presión de hacer cosas. Ahora sólo voy a intentar no pensar en plazos.
Hay un sentimiento mediterráneo, balear en parte de tu música, ¿lo percibes?
No, no sé, me lo preguntan mucho, no sé por qué puede ser (NdE: al terminar la entrevista reconoce haber vivido en Barcelona).
Le pasa a grupos de Reino Unido, de Suecia, quizá es por el sonido Ibiza de ‘Technique’ de New Order… ¿Conoces Delorean?
No… he oído sobre ellos que suenan a The Tough Alliance, eso es todo lo que sé. A mucha gente parece gustarle, eso está bien. No sé nada del sonido balear.
Ni siquiera New Order… ¿Qué escuchabas de adolescente?
Escuchaba primero cosas punk, Manic Street Preachers, lo primero que hicieron me encantaba, luego hip hop como Wu-Tang Clan, mucho rap y soul, y también pop como The Smiths, muchas cosas… Guns ‘N Roses. Me encantaban Guns ‘N Roses…