FFS, el proyecto conjunto de Franz Ferdinand y el legendario grupo de los 70 Sparks, ofreció uno de los mejores conciertos de la pasada edición del festival Cruïlla en presentación de su álbum debut. Varias horas antes, charlamos con el batería de Franz Ferdinand, Paul Thomson (segundo a la izquierda en la foto), en el hotel donde se hospedaba la banda, para hablar sobre este nuevo proyecto, la música que le interesa actualmente o su experiencia en la pasada edición de Glastonbury, donde vio a Kanye West soltar eso de que es «la estrella del rock más grande del mundo»… para su pesar. Hoy actúan en el FIB.
¿Qué significa FFS? ¿Lo obvio o hay algo más detrás? ¿Fue el primer nombre que se os ocurrió para vuestra colaboración con Sparks?
Aparte de ser una combinación de Franz Ferdinand y Sparks, el nombre significa «for fuck’s sake». Es un nombre como universal y sí, fue el primero porque cuando empezamos a trabajar con Sparks no pensamos en que estuviéramos creando algo así como un grupo nuevo, de modo que «for fuck’s sake» fue lo primero que se nos ocurrió y así se quedó.
El génesis de esta colaboración data de 2004. ¿Por qué ha tardado tanto en materializarse?
En 2004 no era un proyecto, simplemente conocimos a Sparks pero no pensamos en hacer un grupo conjunto hasta 2013, cuando empezamos a intercambiar ideas por correo electrónico. Al final nos dimos cuenta de que habíamos escrito hasta 16 canciones y que teníamos un disco terminado.
¿Cómo y a qué edad descubristeis a Sparks?
Yo era un niño. Mi padre tenía una colección de vinilos enorme y me ponía a mirarlos a menudo. Las portadas de ‘Kimono My House’ y ‘Propaganda’ de Sparks me llamaron mucho la atención. Quería averiguar cómo sonaba la música tras esas portadas y cuando los escuché descubrí que no había nada que sonara igual en la colección de discos de mi padre, que era básicamente Americana, música country, rock progresivo y cosas del estilo.
¿Cuál es tu grabación favorita de Sparks?
Cambia todo el tiempo y como ahora tocamos con ellos, a menudo tocamos canciones que nos encantan y que terminamos aburriendo un poco porque descubrimos sus entresijos, su mecánica. Pero diría que una de mis canciones favoritas de Sparks es ‘Number 1 Song In Heaven’.
¿Son Sparks fans vuestros?
Sí, por supuesto. De no ser así, si nos nos tuviéramos respeto mutuo, el proyecto nunca habría sido una realidad.
¿Y os comentan ellos lo que les gusta de vuestro sonido?
No, es una cosa no hablada entre nosotros. Por supuesto Sparks han hablado de ello en entrevistas cuando les han preguntado pero no nos han dicho directamente lo que les gusta de nuestra música; nuestra relación en ese sentido es muy natural. Todo empezó con Alex Kapranos comentando en una entrevista lo mucho que le gustaba ‘Propaganda’; de ahí Sparks nos contactaron, nos conocimos en un hotel de Los Ángeles y empezamos a trabajar juntos. Desde siempre ha sido una relación natural.
Evidentemente Sparks es una de vuestras mayores influencias. ¿Qué consecuencias crees que va a tener esta colaboración en el próximo disco de Franz Ferdinand?
Habrá que esperar para verlo pero normalmente las cosas que nos influencian lo hacen de un modo subsconsciente, nunca es algo explícito. Además, es que este disco lo hicimos muy rápido, nunca habíamos grabado un álbum tan rápidamente: lo hicimos en 16 días. 16 canciones en 16 días. Nos enviábamos las maquetas a través de correo electrónico.
De hecho, una de las canciones, ‘Piss Off’, tiene como 10 años.
Sí, esa canción la escribimos hace 10 años. En realidad, Sparks la escribieron para que Franz Ferdinand la tocáramos en directo pero, por alguna razón, nunca se hizo nada con ella.
¿Cuál es la canción más nueva del disco?
Si no recuerdo mal, alguna de las canciones de la edición de lujo, como ‘Violent Death’. Sin embargo, si bien ‘Piss Off’ tiene 10 años, lo cierto es que el resto de canciones las escribimos hace solo 2 ó 3.
¿Qué tal los vídeos? ¿Os lo habéis pasado bien grabándolos con Sparks?
Sí, el de ‘Johnny Delusional’, con la coreografía y tal, fue muy divertido. Lo grabamos en un día pero no recuerdo el nombre del equipo de producción que lo hizo. Creo que una de las personas involucradas era un chico francés que trabaja en moda o algo así. Pero cuando vi el vídeo ya no pude disociarlo de la canción.
¿Estáis pensando ya en el nuevo single?
El próximo single seguramente sea ‘Call Girl’. Grabamos un vídeo para ella hace tiempo pero todavía no está terminado.
¿Cuándo crees que saldrá?
Probablemente el mes que viene.
¿Y quién lo ha dirigido?
No recuerdo el nombre exacto, era una chica de Nueva Zelanda con base en París.
Hay una canción en el disco titulada ‘Collaborations Don’t Work’. Es gracioso porque, en este caso, vuestra colaboración sí ha funcionado. Pero lo que quiero preguntarte en realidad es si se te ocurren casos reales en la historia de la música de grupos que colaboraran pero que no les saliera bien.
No ocurre muy a menudo que dos bandas se fundan en una para convertirse en una única banda. Supongo que en el mundo del hip-hop sí pasa mucho porque es muy natural que productores y raperos hagan cosas juntos pero no se me ocurren demasiados ejemplos de grupos que colaboraran y formaran una banda sola. Se me ocurre ‘Judgement Night‘, aquella banda sonora de los 90 donde grupos de rock alternativo colaboraban con raperos, con canciones como aquella de Sir Mix-A-Lot con Mudhoney. Pero en cuanto a lo que me preguntas, no sé… ¿Queen y Freddy Mercury?
Aunque a nosotros nos gustó mucho, vuestro último disco, ‘Right Thoughts, Right Words, Right Action‘, recibió críticas encontradas. ¿Crees que lo merecía? ¿Cómo recuerdas ese álbum actualmente?
Estas cosas pasan pero yo creo que era un disco muy bueno y disfruté mucho haciéndolo. Espero no obstante que el siguiente sea mejor.
¿Ya estáis pensando en él?
En verdad no. ¡Si ni siquiera tengo tiempo para dormir! Como para pensar en el siguiente disco… Pero estoy emocionado por poder hacerlo y me siento afortunado de poder dedicarme a lo que me gusta. Pero creo que el proceso de grabar este disco con Sparks ha renovado mis energías para el siguiente álbum de Franz Ferdinand. Sin duda, uno aprende de sus contemporáneos y nosotros desde luego consideramos que Sparks son contemporáneos nuestros no solo porque han sacado música desde que empezamos en Franz Ferdinand sino también porque actualmente están haciendo de la mejor música que han hecho en su carrera. Además, siguen entusiasmados con el grupo como cualquier banda de veinteañeros, y eso es inspirador.
¿Cómo son los conciertos de FFS? ¿Tocáis el disco y además canciones de cada banda?
Sí, hacemos el disco entero y después versiones de Franz Ferdinand y Sparks. Son directos muy divertidos y uno puede ver que nos lo estamos pasando muy bien encima del escenario.
Imagino que tenéis ganas ya de salir al Cruïlla. ¿Has visto el cartel? ¿Te quedarás viendo algún concierto?
Sí, vi que toca Lauryn Hill. Me encanta su disco, ‘The Miseducation of Lauryn Hill’, todavía después de tantos años. También me gusta Kendrick Lamar, le vi actuando hace dos años y me parece un artista muy especial y que realmente sabe captar tu atención.
Lo bueno de Kendrick es que juega mucho con su público y sabe establecer una conexión con sus seguidores en sus conciertos.
Sí, es un poco lo contrario a Kanye West. En cuanto a lo que dijo de que era la «estrella del rock más grande del mundo», pues igual es cierto porque nadie tiene el valor de decirlo en voz alta. Solo él. Eso sí, asistí a su concierto en Glastonbury y me pareció lo peor.
Sí, al parecer hizo una especie de versión de ‘Bohemian Rhapsody’ de Queen…
Me gustaría pensar que lo hizo para tomarle el pelo a la gente, pero con él, nunca se sabe.
Volviendo a Kendrick Lamar, su último disco, ‘To Pimp A Butterfly‘, es de los más prestigiosos del momento. Hasta hay una asignatura que lo estudia… ¿Qué te parece a ti?
No sabía que se estudiaba en la escuela, qué guay. Kendrick me parece el mejor rapero vivo de nuestra generación y creo que ‘good kid, m.A.A.d. city‘ es uno de los mejores discos que han salido este siglo. Es como una densa película. Hay tanto por analizar y tanto por digerir en ese álbum y no creo que haya nadie ahora mismo haciendo lo que hace él. ‘To Pimp a Butterfly’, sin embargo, me parece menos escuchable, con esa producción estilo jazz fusión… Sin duda me quedo con el primero.
¿Qué otros artistas o discos actuales te parecen importantes? Sale tantísima música últimamente…
Es difícil estar al día porque hoy el acceso a la música es más fácil que nunca. Hay una sobredosis de información en ese sentido. Pero me gustan mucho Young Fathers, su último disco, ‘White Men Are Black Men Too‘, es muy bueno. Sin embargo, cuando fui a Glastonbury no vi a demasiados grupos, simplemente merodeé por el festival a ver que encontraba. Evidentemente fui a ver a Kanye West porque me interesaba ver lo que hacía y porque me gusta su música, pero la mayor parte del fin de semana simplemente di vueltas por allí. Vi a un productor de Londres que me gustó mucho, Mumdance. Y a un montón de raperos.