Para más inri, ‘1989‘ no era el disco más vendido en el mundo en 2014, cuando perdía contra la banda sonora de ‘Frozen’, ni tampoco lo lograba en 2015, cuando perdía contra ’25’ de Adele.
Sin embargo, la cantante ha reído la última al hacerse con el premio más importante: el Grammy a Mejor Álbum del Año. Y no es la primera vez que lo consigue, pues ya había triunfado con ‘Fearless’ hace cinco años. ¿Qué supone esto? Ya no hablamos de artistas que nunca han conseguido el Grammy a Álbum del Año, de David Bowie -que sólo fue nominado por ‘Let’s Dance’- a Madonna -que sólo fue nominada por ‘Ray of Light’-; de Prince -que fue nominado por ‘Purple Rain’ y ‘Sign o’ the Times’- a Beyoncé -que fue nominada por su disco homónimo y antes por «Sasha Fierce»-. Todos perdieron en la categoría más importante.
Taylor ya ganó su premio por su disco ‘Fearless’ cuando aún no era una estrella en España y se dedicaba a lo de la música country. Pero con este nuevo galardón entra en el Olimpo de los que no han ganado un Grammy a Álbum del Año sino dos o más, un podio donde no están ni los Beatles ni Bob Dylan ni Michael Jackson, todos ellos ganadores de un solo Grammy a Álbum del Año por «Sgt. Pepper’s», ‘Time Out of Mind’ y ‘Thriller’. Como intérpretes principales -dejamos al margen los recovecos de los featurings- sólo han ganado más de un Grammy a Álbum del Año Stevie Wonder (tres en total), Paul Simon (dos en solitario y uno con Simon & Garfunkel), Frank Sinatra (tres), U2 (dos) y John Lennon y George Harrison al haber obtenido uno por los Beatles y otro en solitario.
¿Hay talento para tanto? Sigo creyendo que no, pero esto suena cada día más como una pataleta. Este Grammy es la guinda perfecta para ‘1989’, un disco reconocido por la crítica, que ha vendido 9 millones de copias y se encamina a pasos agigantados hacia los 10 y que ha consolidado a la artista fuera de su país. Teniendo en cuenta que Taylor tiene 26 años, la edad de su amiga Madonna en ‘Like a Virgin’, esto tiene pinta de ir para largo…
Foto: Grammy.com.