Todos habremos leído y escuchado por ahí comentarios tipo «‘Despacito’ es una canción reggaetonera como hay miles» o «no entiendo qué le ve la gente». Pues bien, está claro que algo tiene, porque sigue encaramada en los primeros puestos de las listas de todo el mundo meses después. Y alguien con suficiente background y conocimiento musical como es el músico, compositor y productor Nahúm García (colaborador de Julio de la Rosa, Wild Honey y Linda Mirada, productor de los últimos discos de Francisco Nixon y Ricardo Vicente, por citar algunos ejemplos conocidos) se ha parado a ello, dando con la piedra filosofal del asunto, al estilo de los análisis de hits pop desde un punto de vista clásico que hace Gonzales. «Vosotros reíros del Despacito, pero la forma en que se rompe el ritmo antes del estribillo es una genialidad. La clave del tema», decía hace unas horas en Twitter, para escándalo de unos cuantos ortodoxos musicales.
Luego Nahúm explicó con detalle (con un esquema visual que se ha hecho viral) que la clave está en que la entrada de la percusión de la canción en su primer estribillo, cuando Luis Fonsi desgrana lentamente los sonidos «des», «pa» y «cito», tiene una leve parada que no encaja en el patrón previsto del ritmo y eso, al parecer, tiene un efecto adictivo. «El tema rompe el ritmo en la parada y no entra de nuevo en el tiempo 1 del siguiente compás. Entra en un punto random». Para demostrarlo, además ha elaborado dos versiones de ese fragmento: una, con la percusión entrando en el momento predecible; y otra, con un cencerro marcando el tempo en contraste con la versión original. Efectivamente, la entrada del ritmo parece absolutamente aleatoria. Un recurso que, además, Fonsi y su equipo solo han empleado en el primer estribillo: «una vez hecho el gancho, repetirlo en los siguientes quedaría demasiado redundante y sería más evidente: no es necesario». ¿Cómo os quedáis?
Vosotros reíros del Despacito, pero la forma en que se rompe el ritmo antes del estribillo es una genialidad. La clave del tema.
— Nahúm García (@nahum) July 3, 2017
porque efectivamente, el tema rompe el ritmo en la parada y no entra de nuevo en el tiempo 1 del siguiente compás. Entra en un punto random.
— Nahúm García (@nahum) July 3, 2017
Os he hecho un croquis para que entendáis visualmente dónde reside la MAGIA de la parada del Despacito. De nada. pic.twitter.com/I6ckZwuCze
— Nahúm García (@nahum) July 3, 2017
Os he hecho una versión donde SÍ encaja a tiempo el Despacito para comparar, y de fondo un cencerro marcando tempo https://t.co/g3rOaDXAVo
— Nahúm García (@nahum) July 3, 2017