A excepción de la primera, una auténtica maravilla que propulsa el universo acústico de su último disco solo al espacio exterior que mostró en el reciente ‘Planetarium’
, ninguna de estas canciones se antoja imprescindible, aunque son preciosas, sin duda. Pero puestas al lado de las sobrecogedoras e imperfectas versiones domésticas –grabadas con un smartphone– de ‘John My Beloved’ y ‘Carrie & Lowell’, queda claro que rehusó a ser completista para entregar lo mejor. En cuanto a los numerosos remixes que completan esta obra, los resultados son más interesantes que sorprendentes. Destacan sobre todo el que el propio Sufjan hace de ‘Drawn to the Blood’, que ofrece una dimensión sideral que enlaza con la citada ‘Wallowa Lake Monster’, la estupenda progresión indietrónica con la que 900X recrea ‘4th of July’ y los de Helado Negro para ‘Death with Dignity’ y ‘All of Me Wants All of You’: Roberto Lange parece comprender a la perfección la idiosincrasia del mundo creativo de Stevens y traslada ambos cortes al lenguaje de ‘The Age of Adz’. También es de agradecer que recupere la rareza ‘Exploding Whale’ –single igualmente concebido en esta era que solo se editó en 7”– en la versión de Doveman –Thomas Bartlett ya produjo parte de ‘Carrie & Lowell’–.‘The Greatest Gift’ es por tanto un complemento perfecto a ‘Carrie & Lowell’, completando el cancionero de la época y trasladando la emotividad confesional de su perfil acústico a otras dimensiones más expansivas e iconoclastas. Gracias por demostrar que los discos navideños pueden tener sustancia y sentido, Sufjan. Ahora, a por más nueva música, por favor.
Calificación: 7,3/10
Lo mejor: ‘Wallowa Lake Monster’, ‘The Greatest Gift’, ‘Drawn To The Blood – Sufjan Stevens Remix’, ‘John My Beloved – iPhone Demo’
Te gustará si: no te conformas con el perfil acústico de Sufjan y te interesa su faceta electrónica.
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