El resto de premios fue mucho más repartido: Nathalie Poza alzó el Goya a Mejor actriz protagonista por ‘No sé decir adiós’; Javier Gutiérrez el de Mejor actor protagonista por ‘El autor’; los premios a la actriz y actor de reparto fueron respectivamente para Adelfa Calvo (‘El autor’) y David Verdaguer (‘Estiu 1993’), mientras que los premios revelación de interpretación fueron para Bruna Cusí (‘Verano 1993’) y Eneko Sagardoy (‘Handia’). El premio a la Mejor dirección novel fue para Carla Simón por ‘Verano 1993’ y ‘La llamada’, que optaba a 5 premios, solo obtuvo el Goya a la Mejor canción original por el tema principal de esta película, a cargo de Leiva. ‘Verónica‘ de Paco Plaza, otra de las grandes nominadas, no se fue de vacío por poco (Mejor sonido). La genial ‘Muchos hijos, un mono y un castillo‘ de Gustavo Salmerón se llevó el Goya a Mejor largometraje documental.
Los que confiábamos en que la elección como presentadores de la gala de los Goya 2018 a Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla implicaría que tendríamos una gala divertida, no podríamos haber estado más equivocados. Más bien al contrario, fue una gala torpe, aburrida y forzada, especialmente cuando –y nunca pensé escribir esto– Sevilla y Reyes aparecían en pantalla. Sí, lograron lo imposible: que echáramos de menos a Dani Rovira.
Finalmente, no ofrecieron un discurso tan subido de mala leche como el que Julián López dio en los Feroz, pero es que además sus bromas fueron previsibles y demasiado naíf, salpicadas con algún momento desconcertante (la vomitona sobre El Langui, algo sobre Maribel Verdú tomando Soberano, ambos sobándose la cara…) que no ayudó en nada. Menos mal que, en el delirio de tratar de hacer ver que no pasaba nada porque la gala –de teórica reivindicación feminista– estuviera creada casi en su totalidad por un equipo de hombres, Leticia Dolera respondió a Reyes con una buena colleja dialéctica: “os está quedando un campo de nabos feminista precioso”. Bravo.
Entre tanto dislate, hubo buenos momentos: especialmente, la entrega del premio a mejor actriz revelación a cargo de Paquita Salas (el actor Brays Efe), que además de repartir tarjetas de PS Management en las primeras filas (“las que interesan”), ofreció un consejo maravilloso a esas actrices: “el objetivo de esta profesión no es ganar premios, el objetivo es ganar dinero: haced pasapalabras
”. También, la entrega del Goya de Honor a Marisa Paredes, espontánea y diva emocionada y emocionante. Y, por último, el discurso de Nora Navas, vicepresidenta de la Academia, lleno de pasión y que, además de atizar un buen bofetón -dialéctico, obviamente– al Ministro de Cultura por incumplir su palabra sobre la reduccción del IVA cultural, dio una lección demoledora con una sola frase: «Solo derrotando a la superioridad de género derrotaremos el monstruo de la violencia contra las mujeres».Este es el palmarés completo:
MEJOR PELÍCULA
– La librería
MEJOR DIRECCIÓN
– Isabel Coixet, por La librería
Mejor dirección novel
– Carla Simón, por Verano 1993
Mejor actriz
– Nathalie Poza, por No sé decir adiós
Mejor actor
– Javier Gutiérrez, por El autor
Mejor actriz de reparto
– Adelfa Calvo, por El autor
Mejor actor de reparto
– David Verdaguer, por Verano 1993
Mejor actriz revelación
– Bruna Cusí, por Verano 1993
Mejor actor revelación
– Eneko Sagardoy, por Handia
Mejor guion original
– Aitor Arregi, Jon Garaño, Andoi De Carlos y Jose Mari Goenaga, por Handia
Mejor guión adaptado
– Isabel Coixet, por La librería
Mejor música original
– Pascal Gaigne, por Handía
Mejor canción original
– ‘La llamada’, de Leiva, por La llamada
Mejor dirección de producción
– Ander Sistiaga, por Handia
Mejor montaje
– Laurent Dufreche y Rául López, por Handía
Mejor dirección de fotografía
– Javier Agirre Erauso, por Handia
Mejor sonido
– Aitor Berenguer, Gabriel Gutiérrez y Nicolás de Poulpiquet, por Verónica
Mejor dirección artística
– Mikel Serrano, por Handia
Mejor diseño de vestuario
– Saioa Kara, por Handia
Mejor maquillaje y peluquería
– Ainhoa Eskisabel, Olga Cruz y Gorka Aguirre, por Handia
Mejores efectos especiales
– Jon Serrano y David Heras, por Handia
Mejor película europea
– The Square, de Ruben Östlund
Mejor película iberoamericana
– Una mujer fantástica, de Sebastián Leilo (Chile)
Mejor documental
– Muchos hijos, un mono y un castillo, de Gustavo Salmerón
Mejor película de animación
– Tadeo Jones 2: El secreto del rey Midas, de Enrique Gato y David Alonso
Mejor cortometraje de ficción
– Madre, de Rodrigo Sorogoyen
Mejor cortometraje documental
– Los desheredados, de Laura Ferrés
Mejor cortometraje de animación
– Woody & Woody, De Jaume Carrió