Low Festival se cerró convocando a otras 25.000 personas en Benidorm, anunciando que será el próximo día 12 de agosto cuando se pongan las entradas de la edición 2020 a la venta. Comenzábamos la tarde de este domingo con el concierto de The Vaccines, que siguen molando tanto como el primer día. Sus singles más recientes suenan estupendos, como ‘Your Love Is My Favourite Band’ o ‘Teenage Icon’, y ‘Dream Lover’ o ‘Handsome’ funcionan igualmente en vivo, pero son las canciones de su debut las que te siguen levantando del suelo incluso en el tercer día de festival, como es el caso de ‘Post Break-Up Sex’ o ‘If You Wanna’. Sin ellas incluso cuesta pensar que los festivales se hubieran inventado. Y ‘Wetsuit’ sigue siendo una canción preciosa. También presentaron una composición nueva que Justin dijo que le daba “buena espina” (“I’ve got a good feeling about this song”) y que es 100% Vaccines. Se llama ‘Let’s Jump Off the Top’ y ya puede darles gusto, pues la han tocado 48 veces según Setlist.fm, todo ello sin editarla. Fotos: Javier Rosa.
La retahíla de buenos conciertos de grupos nacionales de días anteriores continuaba después con Fangoria, que se daban otro baño de masas en Benidorm, un honor para ellos pues hasta en dos ocasiones Alaska apeló a lo que adoran esta ciudad. Su concierto presenta algunos graves y algunos guitarrazos de Jesús Horror de más, pero el abuso de voces pregrabadas ha quedado atrás y eso se traduce en un derroche de energía transmitido al público desde que el grupo comienza con el voguing de ‘Espectacular’, ‘Fiesta en el infierno’ y el recuerdo a Sara Montiel de ‘Absolutamente’, hasta el final. Y es que tras algunos cambios de vestuario y un par de temas de su último disco de versiones, como ‘Estoy llorando por ti’, con proyecciones desérticas y desoladas; e ‘Historias de amor’ de OBK, a la que ahora se incorpora un fragmento de ‘Descongélate’; la traca final es estupenda. ‘No sé qué me das’ y ‘Retorciendo palabras’ suenan a gloria juntas, y aún quedan por sonar las versiones actualizadas de ‘Ni tú ni nadie’ y ‘A quién le importa’ de Dinarama. Acaba esta y la gente continúa cantando su estribillo sin que suene la música, pero Fangoria no iban a terminar bien arriba con una canción de Dinarama y finalmente se despiden con ‘Dramas y comedias’, uno de sus últimos himnos generacionales.
A las 0.25 tenía que tomar la decisión de ver a La Zowi por segunda semana consecutiva o a Vetusta Morla por tercera semana consecutiva. Escogí lo primero solo para ver la cara de mis amigas viendo la performance actual de la autora de ‘Putas – Remix’. Exactamente igual que en el FIB La Zowi deja gran parte del protagonismo de su show a dos bailarinas haciendo twerking, a las que no para de echar botellas de agua en el culo; apaga las luces y pide al público que haga lo que quiera en la oscuridad; y grita cosas como «¿os gustan las putas? Somos putas». La intimidad del Escenario Jägermeister le sienta fenomenal a su performance y el público numeroso la acoge con cariño. Está haciéndole mucho bien su presentación por festivales a un Autotune pegada.
Vetusta Morla tocan durante más tiempo y tras La Zowi puedes asistir al final de su concierto, otro baño de masas más, en el que el técnico de sonido se recrea a cada segundo: el modo de ahogar lo justo la voz desgañitada de Pucho en el caos controlado de ‘Mapas’ es una chuchería. ‘Sálvese quien pueda’ y ‘Valiente’ con un extracto de Iggy Pop mantienen el nivel alto, y de nuevo las autoproyecciones de Pucho para ‘Te lo digo a ti’ parecen ensayadas al milímetro. El cantante habla de lo divertido que es el Low Festival, pero pide al público que sigamos acudiendo a las salas de conciertos en invierno, que no nos quedemos «en casita». El gran momento de la noche sucede cuando Vetusta Morla incorporan a una versión ultra extendida de ‘El hombre del saco’ fragmentos de temas de grupos españoles que han pasado por el Low. Pucho entona frases de los estribillos de ‘Dramas y comedias’ de Fangoria, ‘Hoy la bestia cena en casa’ de Zahara, ‘Cayetano’ de Carolina Durante, ‘Que no’ de Deluxe, ‘Mira cómo floto’ de Miss Caffeina o ‘Autoestima’ de Cupido. Mataría por ver la cara especialmente de Alaska y de Pimp Flaco durante este detallazo que seguro que nadie les devuelve. Vetusta Morla, que últimamente están haciendo especial hincapié en su faceta política -y las cosas no están para menos, atentos al Twitter de Guille Galván-, parecen subrayar con este popurrí que mientras hay algunos que no se sacan España de la boca sin aportar nada, hay otros que aman la cultura española, el pop español actual, que no puede ser más rico ni variado ahora mismo, cada uno de los días de su vida.
Tras este subidón, de ser Guille Milkyway, yo me habría encerrado en mi camerino ideando cómo poder superarlo. Pero el concierto de La Casa Azul en presentación de ‘La gran esfera’ en festivales ante miles de personas está más que ideado y son varios los momentos en que la puesta en escena es espectacular, especialmente ese final con ‘Nunca nadie pudo volar’ en el que vemos a Guille perfectamente integrado con los visuales a su espalda. Antes han hecho vibrar al público un sinfín de hits como ‘Superguay’ o ‘Esta noche solo cantan para mí’. No hay lugar para baladas ni temas al piano a las 3 de la madrugada -Guille agradece el aguante del público hasta entonces-, por lo que el ritmo es estupendo también gracias a la solidez de temas recientes como ‘El momento’ y ‘El final del amor eterno’, con los que se abre el set, o ‘Podría ser peor’. Guille habla de amor y sexo en ‘La revolución sexual’, lo cual tiene todo el sentido en una ciudad tan dada a ambas cosas como Benidorm, y parece mentira que las cosas hayan salido tan bien al autor de ‘Cerca de Shibuya’. Ya esta ni cabe en el set, y nadie se ha dado cuenta.
Inmediatamente antes de La Casa Azul, también pudimos disfrutar de un entretenidísimo concierto de Mø, en el que la cantante no dejó de interactuar con el público, como para demostrar que ella no ha de depender de ‘Lean On’, la cual tampoco falta. Hubo un momento en que se lanzó al respetable, pero lo mejor fue que se atrevió a atravesar la mitad de la explanada del escenario para ofrecer un par de canciones subida en un altillo de la torre de sonido, entre ellas ‘Nights With You’. La noche acaba o bien en la piscina gigantesca de la zona VIP Pool o bien con las carpas de dj’s, de Chemical Brothers a Raffaella Carrá, y es ‘Emerge’ de Fischerspooner la última canción que se pincha en el Escenario Energy System, donde actúa Cori Matius. La fiesta continúa, como es habitual, en los afters de las inmediaciones, donde ya es de día y los últimos lowers desayunan cerveza y calimocho, mezclados con la ciudad que empieza la semana.