Y eso que sí comienza a ese nivel, empezando por una coral ‘Intro al perreo’ –producida por Kiid Favelas, principal artífice de los beats del disco– en la que La Zowi y su gancho –“Sé que te gusta como lo hago / Sé que por mí sacas el fajo / Le gustan otras pero yo soy un regalo / Se vuelve loco cuando me lo trago”– dan salida a una dura colección de estampas sexuales explícitas –tónica habitual de esta colección– por parte de La Goony Choonga, Kaydy Cain, Albany, Javielito y el propio Fernando Gálvez. ‘La 40’, con la siempre estupenda Favi –cabe destacar lo mucho que ganan los temas del «Sekito» cuando el gancho lo sirve una chica–, la mencionada ‘Articuno’ –genial la referencia a Pokémon de la rapera valenciana– y ‘Mala’, de nuevo con Dani Gómez y con una fascinante producción ambiental de Paul Marmota, engrandecen una primera mitad que culmina con la ultraexplícita (“Le como el culo y subo pa la tota”, comienza) ’Mala y Bouge’, que no es exactamente una adaptación del hit de Migos sino el perfecto canon de lo que pretende ser este “perreo de la muerte”: bailes sudorosos y lentos para restregarse con (o contra) un partenaire sexual sin barreras.
Sin embargo, no alcanza ese propósito en una segunda parte del disco que se torna repetitiva y menos inspirada, con el seductor ‘Luna llena’, dueto de alta tensión sexual con La Zowi, como gran excepción. Y es que, pese a que los BPMs suben (en ese plano, destaca el potente ‘Dile’, reconciliación con Cecilio G. de la mano de Marvin Cruz) y que Fernandito Kit Kat se luce en números inapelables como ‘Gana e malianteo’ (“yo soy pura calle, soy la carretera”) o ‘Camino solo’, ‘De repente’ y ‘Su cura’ (al menos esta destaca por su letra, un Padre Nuestro en el que se cuela “una monja que se moja cuando la iglesia está llena de hombres”) son reiterativas, con ganchos blandos.
En ellas también se hace evidente cierta involución técnica, cierto amateurismo militante que hacen que esta segunda parte de ‘Perreo de la muerte’ suene peor que el primero. Especialmente cuando se recurre a unos filtros vocales que además de sonar casi amateurs hacen sus barras casi ininteligibles. Y lo que es peor: ni siquiera nos importa demasiado. Sin olvidar que siempre esperamos lo mejor de Yung Beef, considerándole uno de los raperos más talentosos y genuinos de la actual generación española, ‘Perreo de la muerte’ decepciona. Y es que, si estamos de acuerdo en que se trata un disco de baile sin más pretensiones, algo falla cuando tampoco en ese plano es completamente disfrutable. Yung Beef presentará ‘Perreo de la muerte 2’ en tres únicas fechas en España, comenzando este sábado 7 de septiembre en la Sala Apolo de Barcelona. Continúa el 12 y el 14 de septiembre (se añadió la segunda fecha al hacer sold out la primera) en la Sala Cool de Madrid y el 27 y el 28 de septiembre (al revés que en Madrid, se ha añadido la primera tras agotar la segunda) en la Industrial Copera de su natal Granada.
Calificación: 6,9/10
Lo mejor: ‘Intro al perreo’, ‘La 40’, ‘Mala y Bouge’, ‘Articuno’, ‘Luna llena’, ‘Dile’
Te gustará si te gusta: el reggaeton underground, anticomercial.
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