Música

Victoria Monét / JAGUAR

Puesta a escribir su primer disco largo, Victoria Monét no ha querido buscar superproducciones como ‘7 Rings‘ o ‘thank u next‘, dos de las muchísimas canciones que ha co-escrito junto a su gran amiga Ariana Grande y otras personas, y gracias a las que no volverá a pasar hambre nunca jamás. Con Ariana comparte su gran afición por el R&B de los 90 -nombres como Brandy & Monica y Aaliyah-, pero en este caso Monét ha huido de las modas para ofrecer un álbum más setentero cuya mayor baza en el difícil camino de la diferenciación son los arreglos clásicos que utiliza.

En ‘JAGUAR’ encontramos algún estándar de R&B y a simple vista singles como ‘Moment’ y ‘Ass Like That‘ podrían haber aparecido en la discografía de Mariah Carey. Sin embargo, en la primera ese leit motiv «this your motherfuckin’ moment» está aderezado por una bonita sección de cuerdas, y en la segunda, aunque Victoria nos esté hablando de un asunto tan baladí como su gimnasio, de su derecho a cuidar su cuerpo en general y su culo en particular, en un intento de presumir de sus dotes «como lo haría un hombre», los arreglos del estribillo parecen corresponderse en verdad con el amor más bonito del mundo. Claro que quién dice que este no es sino el amor a uno mismo, como postula otro de los temas, ‘Big Boss’.

La clave de ‘JAGUAR’ se encuentra en el amor hacia los clásicos, toda una rareza en el mundo de hoy. Si siempre ha profesado su amor lo mismo por Beyoncé y Janet Jackson que por los británicos Sade, Victoria Monét ha querido ahora hacer un disco deliberadamente setentero. Para comprenderlo basta con echar un vistazo a una playlist de músicos negros que le han influido, la que hizo para Billboard hace unos meses. Allí estaban por supuesto Marvin Gaye, imprescindible para cualquier fan de la música sexy, pero también llamaba la atención la presencia de otros éxitos un tanto perdidos de los 70 como ‘Sweet Thing’ de Rufus con Chaka Khan o la orquestada ‘Wishing on a Star’ de Rose Royce

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Añadiendo una sección de metales muy Burt Bacharach, las canciones de ‘JAGUAR’, en ocasiones firmadas completamente en solitario por Monét, aparecen por tanto exquisitamente arregladas, sin desesperación ni excesos. En ‘Dive’, sobre sexo oral, el clímax alcanzado entre gemidos a lo Jane Birkin y metales a lo Carpenters es épico. Igualmente despunta el tema titular, dos canciones en una, pasando de las bonitas armonías iniciales a un ritmo más ochentero y festivo, antesala del tema al que precede en la secuencia.

La lista de influencias bien asimiladas de Victoria Monét da lugar a un álbum muy bien armado, en el que los interludios sirven de guía y, aunque ella dice que quizá los desarrolle en el futuro (este disco es el primer EP de un álbum conformado por 3 partes), llegan a poseer ya entidad por sí mismos: ‘Big Boss’, tan significado; y ‘We Might Be Falling In Love’ como segunda parte de ‘Dive’.

D’Mile, quien colaboró con Rihanna y Janet Jackson en los 2000 (es hijo de una corista de Roxy Music y del productor Dernest Emile), es el productor recurrente en todas estas canciones, otorgándoles cuerpo y unidad… con una excepción. ‘Experience’ junto a Khalid y bajo los mandos de SG Lewis (últimamente de moda por su colaboración con Robyn y Channel Tres) es un gran número disco-funky que recuerda al injustamente olvidado dueto entre Dua Lipa y Miguel, que podría haber aparecido en el disco de Jessie Ware. Y también le ha salido bien. El a capella que cierra, ‘Touch Me’, sobre el amor por una chica (Victoria se reconoce bisexual y afirma que para ella era muy importante meter la palabra «girl») será oficialmente el punto de partida de la segunda parte de todo esto, pero atención a las posibilidades abiertas por ‘Experience’.

Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘Dive’, ‘Experience’, ‘Ass Like That’, ‘Moment’
Te gustará si te gustan: Marvin Gaye, Rumer, Beyoncé
Youtube: vídeo de ‘Experience’

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Publicado por
Sebas E. Alonso