Kylie Minogue no se ha complicado la vida con tales fruslerías como la posesión de armas, y ha dado al público lo que pedía: un mensaje hedonista sobre el primer beso, sobre un amor que «le encanta» compartir, y para él ha contado simplemente con los sintetizadores de Duck Blackwell. Le basta y le sobra en esta gran canción que es una de las más adictivas de ‘DISCO
‘: primero parece una medianía, y después se pega como una lapa. Es exactamente lo que esperábamos cuando Kylie empezó a contarnos que preparaba un «disco maduro de música disco».Aunque prefiriera presentar el álbum con algo diferente como ‘Say Something‘ (como ya hiciera con la glam ‘2 Hearts’ en ‘X’), y la canción más carismática de esta era esté llamada a ser ‘Magic’, porque ya es aquella con la que cierra sus conciertos, ‘I Love It’ puede ser el nuevo ‘The One’, una favorita para parte de su público por mucho que no sea la canción más conocida.
La cantante ha hablado así sobre su creación en Apple Music, donde podéis encontrar un «canción por canción» muy interesante: «es una de las canciones en las que trabajé con Biff Stannard, un día o dos antes del confinamiento. Tenía un estribillo ligeramente diferente, que no funcionaba. No queríamos tirar la toalla, así que hice algunos cambios en casa y añadí la frase «So come on, let the music play, we’re gonna take it all the way», inspirándome en Lionel Richie. Esa pequeña reestructura la llevó a donde tenía que ir y encontró su lugar en el álbum».