Con su acidez habitual, Morrissey ha indicado que «después de la edición en marzo de 2020 de ‘I Am Not a Dog on a Chain‘, que ha sido número 1 en Escocia, número 1 en Polonia, número 3 en Gran Bretaña, número 3 en Francia, número 10 en España, número 13 en Alemania; y número 2, número 9, número 17 o número 18 en Estados Unidos dependiendo de qué lista oficial sigas, BMG cuenta con un nuevo ejecutivo que no quiere otro disco de Morrissey. En su lugar, el nuevo ejecutivo anuncia nuevos planes de «diversidad» en el roster de BMG».
Tras lanzar esa pulla al streaming a través de la referencia a las listas estadounidenses (y esquivar qué posición ocupó dicho álbum durante su 2ª semana en todas esas listas), Morrissey apunta a lo catastrófico que ha sido 2020: «Estaríamos críticamente locos si hubiéramos esperado algo bueno». A continuación apunta a la calidad de sus últimos discos, refiriéndose a ‘Low In High School
’, ‘California Son’ y el último. «Mis 3 discos con BMG han sido los mejores de mi carrera, y los defenderé hasta que me muera. Grabarlos ha sido un periodo clave de mi vida y agradezco al equipo de BMG y a todo el que se involucró con ellos. Para mí todavía es importante hacer la música a mi manera, y no querría que un sello dictara cómo los artistas deben comportarse, sobre todo cuando la palabra «talento» de manera notable nunca se menciona».Morrissey, que ya estuvo buscando sello penosamente a principios de la década pasada, y cada vez lo va a tener más difícil dado su gusto por las polémicas sociopolíticas, sostiene que su residencia en Las Vegas de cara a 2021 continúa en pie y atribuye a Alistair Norbury de BMG la siguiente cita: «Hay demasiados casos de artistas exitosos que languidecen en sellos que ya no están interesados en ellos».
La noticia se produce en la misma semana en que un dueto entre Morrissey y Bowie en directo se ha publicado a través de Parlophone/Warner. La relación entre ambos fue controvertida en última instancia y lo último que se supo sobre ellos es que Bowie no quiso aparecer en una portada de un single de Morrissey. Este le cambió por Rick Astley y a la postre no se pronunció sobre la muerte del artista.