Porque Halloween es una festividad medio terrorífica, medio divertida, Duran Duran publican esta semana un álbum inspirado en la víspera del Día de Todos los Santos que cabalga entre ambos mundos. El 16º disco de la banda trasciende además lo anecdótico al recuperar a miembros del grupo que no intervenían desde hace 20 años o casi, como es el caso de Andy Taylor -que el año pasado reveló que sufría cáncer– y Warren Cuccurullo. ‘DANSE MACABRE’ incluye 3 temas inéditos, adaptaciones de sí mismos para la ocasión y finalmente versiones de otros artistas.
Mucho antes de la balada ‘Ordinary World’ (1993), conocimos a Duran Duran como una de las bandas responsables del movimiento neo-romántico. Por tanto, esta celebración de lo oscuro que recibe tan simpático nombre tiene su razón de ser. Su tema ‘Night Boat’ ya daba cierto miedo en su debut de 1981, y además de convertir temas propios como ‘Secret Oktober’ -una cara B de 1983- en ‘Sekret Oktober 31st’, y ‘Love Voodoo’ de 1993 en ‘Love Voudou’; lo mismo han versionado a leyendas como Talking Heads (‘Psycho Killer’) y Cerrone (‘Supernatural’) que a artistas jóvenes como Billie Eilish (‘Bury a Friend‘).
‘DANSE MACABRE’ tiene sus momentos acertados, si bien bastante diluidos entre otros que desconciertan por su vena abiertamente «cheesy». Hay grabaciones que parecen haber pensado mucho, como su adaptación de Billie Eilish, bastante peculiar; otras que no se han currado nada, como la de ‘Paint It Black’ de los Rolling Stones; y otras que debieron haberse ahorrado.
‘Super Lonely Freak’ es un remedo de un tema propio, ‘Lonely In Your Nightmare’, y el clásico de Rick James, ‘Super Freak’. Ya sonaría extrañísimo per se en boca de Duran Duran, pero sumando que Nicki Minaj rapeó un montón de guarradas sobre la misma base el año pasado en un tema con 500 millones de streamings, no parece una buena idea. Sobre todo cuando a continuación aparece una versión de ‘Spellbound’ de Siouxsie and the Banshees, por supuesto grabada totalmente en serio, como no podía ser de otra forma.
‘DANSE MACABRE’ solo funciona como una playlist sobre Halloween con un poco de todo dentro. Una muy mal secuenciada, dispuesta al azar, sin prescriptor al mando. Tras canciones abiertamente divertidas como ‘Ghost Town’ de los Specials, las guitarras identificativas de Nile Rodgers en ‘Black Moonlight’ y detalles que hacen pensar en la Melanie Martinez más siniestra, como la nueva ‘Sekret Oktober 31st’, el álbum se cierra con una colaboración de Victoria de Angelis de Måneskin en ‘Psycho Killer’ y la balada ‘Confession in the Afterlife’, sin que ninguna deje ningún poso. Al final el álbum jamás logra ser tan macabro como uno de Fever Ray, ni tan ameno como uno de Olivia Rodrigo. No era tan fácil hacer algo creepy y divertido al mismo tiempo. Por algo cada Halloween vuelve a viralizarse ‘Thriller’.