Entre sus dos primeros discos, ‘SweetSexySavage’ e ‘It Was Good Until It Wasn’t’, Kehlani lanzó una mixtape para amenizar la espera de su segundo largo. El proyecto se llamaba ‘While We Wait’ y contaba con 9 canciones, probablemente aquellas que no encajaban en los universos de ninguno de esos dos proyectos. Ahora, escasos meses después de lanzar su cuarto disco, ‘Crash’, llega la secuela de aquella mixtape.
‘While We Wait 2’ no deja claro qué es exactamente lo que tenemos que esperar. Quizá es un indicativo de que Kehlani se tomará un tiempo de descanso, o quizá simplemente quería volver a sacar música inmediatamente. Sea como sea, en este nuevo proyecto no encontraremos sus composiciones más novedosas o interesantes, pero sí una colección de canciones agradables con un identificable sello marca de la casa.
El proyecto se gestó en apenas dos semanas, sin pensarlo demasiado -en palabras de Kehlani- y se hizo entre amigos cercanos. Para lo bueno y para lo malo, esa espontaneidad en su creación se nota. Si bien el sonido es envolvente y sensual, la repetición de ideas y la poca profundidad de las letras, a menudo hacen de él una experiencia monótona y no demasiado memorable.
Sin extasiar a nadie, temas como ‘S.I.N.G.L.E.’ o ‘When He’s Not There’ con Lucky Daye evidencian el buen oído de Kehlani para crear melodías pegajosas y sugerentes. Otros, aunque prometedores, no tardan en caer en los mismos patrones que lleva construyendo desde el principio de su carrera. Es el caso de ‘Know Better’ con Lil Mo y Vince Staples, que se estanca pronto en un beat genérico donde los invitados no llegan nunca a encontrar su espacio; o de ‘Border’, una intensa balada sobre salud mental muy poco inspirada a nivel melódico.
Mucho más interesante es la colaboración con Destin Conrad y Childofnines, ‘Form of You’, construida a raíz de una bonita línea de piano, donde la química de las voces de los tres artistas otorga a la composición una cualidad atmosférica muy especial. ‘Balling’ y, sobre todo, ‘Around’ también son otros de los puntos álgidos, aligerando la secuencia con un sonido más dinámico y luminoso.
El disco termina con dos nuevas versiones de dos de las mejores canciones de ‘Crash’: ‘8’ y ‘After Hours’, la primera con FLO y la segunda con Ludmilla. Ambas mantienen una energía similar a las originales, sin nada demasiado nuevo que ofrecer, aunque los versos añadidos en portugués de la cantante brasileña en ‘After Hours’ sí aportan cierto encanto.
‘While We Wait 2’ es una digna recopilación de canciones generalmente bien escritas y producidas donde Kehlani no toma ningún riesgo artístico, ofreciendo exactamente lo que sabe hacer sin intentar explorar nuevos sonidos. En ocasiones, la fórmula llega bastante degastada, pero en otras se puede encontrar cierto confort en lo ya conocido.