El estancamiento del género urbano en España cada vez es más claro. Pocas veces surge algo en el panorama que provoque una reacción sorpresiva, con la mayoría de los artistas envueltos en la rutina de sacar la misma canción que el vecino una y otra vez. Esto podría dar para un artículo entero. Nico es una agradable sorpresa, destacando entre un mar de copias con un simple golpe de guitarra.
El joven artista murciano irrumpió este año en la escena con un EP colaborativo con la Cutemobb, el colectivo artístico de Barcelona liderado por LEÏTI. ‘NUEVO’ presentaba un sonido, pues eso, muy en la línea del trap del grupo catalán. Unos meses después, NICO definió su identidad artística con un giro completo, cambiando los beats por una melancólica guitarra, pero manteniendo el mismo flow, en el EP ‘Píldora’.
Es en ‘EL ADIVINO’, la Canción del Día, donde Nico demuestra que sabe muy bien cómo poner sus talentos al servicio del pop. El artista murciano no sacrifica nada de lo que ya ha mostrado en sus anteriores lanzamientos, manteniendo la cadencia y las rimas del trap, al igual que las pegadizas melodías de su EP «acústico». Sin embargo, gana por lo orgánica que se siente la instrumentación. En resumen, se siente fresco, pese a no haber inventado nada.
En cuanto a la letra, esta gira en torno al síndrome del adivino, conocido en psicología como el anticipamiento de un desenlace negativo por parte del paciente en cualquier situación, pese a no tener pruebas ni indicios de ningún tipo.
Durante la mayoría de la canción esto se aplica a una historia de amor. El plot twist es el accidente de tráfico que seguro nadie vio venir: «El autobús iba explotar / Te miraba en el reflejo del cristal, avergonzado», canta en el estribillo.
