
Ingredientes para 4 personas:
4 melocotones grandes
1 litro de helado de nata
4 cucharadas de azúcar moreno
4 cucharadas de azúcar blanco
4 claras de huevo
almendras
En un bol para batidora, echad el helado, el azúcar moreno, almendras picadas y los melocotones, bien pelados y troceados. Batidlo todo y metedlo en la nevera. Ahora hay que montar las claras con el azúcar blanco, con la ayuda de ese utensilio algo extraño que pulula por las cocinas: unas barillas (si vuestra batidora tiene opción de barillas, os hará un favor muy gordo porque en un periquete lo monta todo. Si lo tenéis que hacer a mano, pues paciencia). Poned el horno a calentar a 180º. Introducid las claras a punto de nieve en una manga pastelera, dibujad cuatro montañitas en la bandeja del horno y ponedlo a gratinar durante 10 minutos aproximadamente. Colocad la mousse de melocotón en copas y colocad las claras gratinadas por encima. Si lo metéis unas horas en la nevera antes de servir, mejor que mejor.



Ya parezco un niño caprichoso con lo de «Esto no me gusta, quiero que vuelvan 


El pasado lunes Cuatro estrenó un nuevo programa llamado 









Desde el año pasado lo llevan diciendo algunas webs especializadas y, lo que parecía ser de esas cosas de las tendencias que se dicen por decir, se ha convertido en algo real. Desde que volvió a ser moda el rock’n’roll y bandas como The Raveonettes reinventaron el concepto de «canciones de tres acordes», los grupos de chicas están de enhorabuena y el revival generalizado que se está viviendo afecta de lleno a esta corriente del pop que tuvo su apogeo en los años 60. Se reeditan los clásicos vinilos, salen al mercado nuevos recopilatorios, se comercializan rarezas y diverso material inédito, las grandes del pop vuelven en su madurez al estudio… Y con las bases musicales de la Motown, Red Bird o aquellos sellos míticos del girlie pop, nacen ahora nuevos grupos de chicas, en todas las modalidades, para deleite de nostálgicos y amantes del retropop.
Parece que las que han tocado antes la cumbre han sido The Pipettes con su recién llegado ‘






A lo largo de agosto y septiembre (en cada rincón del mundo en una fecha diferente, creo que en España nos toca el 5 de septiembre) se pone a la venta el tercer disco de Hidden Cameras, ‘Awoo’, pero ya lleva tiempo circulando por el Soulseek. Los canadienses dirigidos por el hombre orquesta Joel Gibb se dieron a conocer en 2003 con un primer disco llamado ‘The Smell of our own’. Su singularidad residía en la etiqueta con la que denominaban a su propia música, «gay church folk music», en sus directos, con go-gós en paños menores, o en sus letras, tan escandalosas como ininteligibles. Publicamos la crítica del nuevo disco y recordamos los dos anteriores.


Después de arrasar en UK con su primer disco, donde conquistaron a lectores de Smash Hits, lectores de Attitude, lectores de NME, abuelas y niños, y arrasar en todo el mundo con una gira divertida como pocas, vuelven Scissor Sisters. ‘Ta-dah’ es un disco continuista que parece buscar consolidar al grupo fuera del Reino Unido, donde no son excesivamente famosos. Sale a la venta exactamente dentro de 2 meses, pero analizamos ya el disco canción a canción, sólo, aviso, después de una escucha.




Detrás de este flequillo de tolai se esconde un auténtico cerdo de la literatura universal. Digo «cerdo» no en plan despectivo, sino porque sus libros, entre p*edofilias, n*ecrofilias, c*oprofagias y otras cosas que sin el conveniente asterisco nos provocarían comentarios más desagradables que los que solía haber hace unos años en spanishpop.net, día sí, día también, son una auténtica guarrería. «Tufo», «esperma» y «mierda» son sus palabras favoritas, o sea que poco que ver con el cristalino estribillo de Blondie que hoy nos da título.