Si el dúo ya llenaba grandes escenarios, con este tercer largo de Gran Pop tan sólido como atractivo ya deberían mirar a la cara de estrellas internacionales.
Iggy Pop referencia los 70 con Bowie y lidia con la muerte y el fracaso en el que podría ser su disco de despedida. Por suerte, su pesimismo no guarda relación con los resultados artísticos.