Y resulta que el Galisteo (Operación Triunfo, a.k.a. el Churrero) tiene el morro de decir que él tiene muchos amigos gays que le llevan a discotecas de ambiente y que por eso se le ve por allí. Ya claro, y vamos nosotros y nos lo creemos. ¿Ningún representante ha pensado nunca que es más honesto decir la verdad y que no pasa nada? ¡Por favor, si ya hay hasta cantantes de hip-hop homosexuales declarados!
Pues bien, esto es ‘I promise myself’, el primer single del Galisteo, una canción versionada del original, que popularizó Nick Kamen y que ya han versionado otros muchos, como los A *Teens. Ahora llega éste y se hace un vídeo con el PowerPoint (por favor, ese calendario es tan de presentación caspa del PowerPoint…) y con unos estilismos que ni Madonna. Los desgranamos uno a uno:
– Estilo marica en la nieve: Todo de blanco, con boina en lugar de gorro (será que le da el sol), la camisa abierta hasta el ombligo (igual tiene calor) y unas botas de peluche blancas I-N-E-N-A-R-R-A-B-L-E-S.
– Estilismo Luis XV: Bien de dorados, de peluca y de barroquismo. Parece Manuela Trasobares, sólo le falta Rubens. Y bien de soltar pluma con la genuflexión y el pañuelo, vaya tela.
– Estilismo chico Martini: Ya le gustaría a este. Por cierto, ¿tiene las piernas cruzadas al estilo Pantoja?
– Estilismo chandalboy de periferia: ¿No venía de Hospitalet este? Se le nota, porque el atuendo de choni chacho y el decorado del Radikal le quedan fenomenal. Por mucho que le hayan intentado poner una gorra torcida, un jersey flúor rollo nu-rave y unos tirantes para que parezca un moderno, sigue llevando un sello de oro en toda la mano.
– Estilismo pijo de campo de golf: Que le queda como a un Cristo dos pistolas.
– Estilismo Boris Becker: No comment, imagino que lo han introducido para los fetichistas de la ropa deportiva.
– Estilismo chuloplaya fardahuevos: el bañador no podía ser más mínimo y evidentemente, había que sacar un poco de carne del niño, que si no no vende ni un disco.
– Estilismo marica ibicenca con pareo: le falta una camisa de lino desabrochada.
– Estilismo colegial: El rollo otaku se lleva muchísimo, no hay más que verlo. ¿Queda un poco mal si digo que es cuando más me pone?
– Estilismo cazador: Jo, casi me meo con este. ¿No va haciendo la marcha militar? ¿Igual está un poco confundido? Nena, ¡que te han vestido de hunter, no de militroncho!
– Estilismo asesino de focas: Y bien de pieles y bien de morritos también. ¿Es necesario cantar tan afectado, hijito?
– Estilismo Superestar: Ya para cerrar este vídeo, una última pregunta. ¿Cuánto tiempo se habrá pasado Randy Cuesta con los microafinadores? Porque hay que ver qué mal cantada está la versión final, así que la primigenia… Ay, no lo quiero ni pensar, que me pongo malo.