Durante los años de emisión de ‘Crónicas marcianas’, muchos de los autores de este blog estudiábamos Ciencias de la Información. En aquella época, cualquier asignatura era buena para hablar mal del programa en clase: ‘Ética periodística’, ‘Derecho de la información’… Ningún profesor elogiaba su ritmo, su genial adaptación a España de los «late-shows» norteamericanos, el sentido del humor en la utilización de la música cuando algún invitado hacía alguna declaración supuestamente impactante, etcétera. ‘Crónicas’ tuvo sus momentos aburridos y megacasposos, sobre todo cuando empezó a incorporar comentaristas de ‘Gran Hermano’, pero en más de un sentido podía considerarse una obra maestra del entretenimiento del siglo XXI, no siempre en su contenido, pero sí al menos en su forma.
Después de un programa sobre viajes que a pesar de no tener malos resultados de audiencia, sí pasó un poco desapercibido, Javier Sardà volvió el viernes a presentar un «late-show», esta vez a medio camino entre el prime-time y el late-night. Ya no es diario, se emite un día de la semana un poco raro, pero no deja de ser un nuevo ‘Crónicas marcianas’ más centrado en las entrevistas y con las apariciones esporádicas de Mercedes Milá, con una obsesión por los comentarios de internet un poco preocupante, pero divertida.
Los primeros invitados fueron la ex ministra de Fomento Magdalena Álvarez, Amaia Salamanca (‘Sin tetas no hay paraíso‘) y Risto Mejide, ese jurado de OT que iba de mucho y ha terminado componiendo unas canciones horribles a Labuat.
‘La tribu’ no supo sacar absolutamente nada interesante a Magdalena Álvarez, de cuya aparición lo mejor fue la proyección de unas imágenes suyas en bikini, por lo que cabe pensar que el programa difícilmente seguirá por los derroteros de las entrevistas a personajes «serios». Tampoco Amaia Salamanca supo contar ni una anécdota graciosa sobre El Duque o sobre su propia carrera por más que Mercedes Milá intentó tirarle de la lengua. La cumbre del programa fue un duro enfrentamiento entre Xavier Sardà y Risto cuando éste le recriminó que fuera tan ostentoso en tiempos de crisis económica. No se sabe si estaba preparado, pero tenso y desagradable, fue.
El programa cuenta también con las imitaciones del gran Carlos Latre, Boris Izaguirre y toda la retahíla de friquis y futuros friquis entre los que destacó el padre Loring. Seguro que el programa se va haciendo más exitoso a medida que tira de ahí y se parece más a ‘Crónicas marcianas’.
Calificación: 6/10
Destacamos: a Carlos Latre
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Predictor: Con un 14,9% de share, no superó a ‘Dónde estás corazón’, pero está en torno a la media de la cadena. Aprobadillo por los pelos.