Sólo tres horas de ‘Gran Hermano’ y la undécima edición del programa ya nos ha dejado frases, personajes y momentos antológicos. «Chico que veo, chico que tengo», «Estoy giñao», «Tengo un pelo difícil» o «Me siento muy artista, no sé cómo explicarme» se sumarán en nuestro vocabulario diario a «dónde están los papeles de la paella», «simbiosis», «quién me pone la pierna encima», «nadie!!» o «Aidaaaaaaaaaaaaaa». Los guionistas ya rallan con este venga a sacar personajes de una casa y meter en otra, que no hay quien se entere de cómo va a funcionar este año exactamente el tinglado, pero hay que reconocer que mientras la casa 1 parece el mismo rollo de siempre (un montón de musculitos y teñidas entre los que pronto habrá carnaza y un par de personajes «alternativos»), la casa 2 promete.
Este año GH va de lo siguiente. En la casa 1 hay 11 concursantes. Todos son observados, aunque no lo sepan, por otros 6 concursantes que están en la casa 2, que se conoce como «La casa de los secretos». En esta casa hay dos lesbianas casadas que tienen que ocultar a los otros cuatro que son pareja; un greñas de Madrid y una pijilla de Barcelona que tienen que fingir que son pareja aunque no se conocían; una chica que tiene a su madre en la casa 1 pero tiene que ocultar al resto que es su madre; y un chico que sabe el secreto de los otros cinco sin que ellos sepan que lo sabe. No se ha dicho lo que pasa si se descubre a alguien. De momento luchan por acertar quién va a ser expulsado de la casa 1 y así pasar a ella, a concursar de verdad, porque de la casa 2 no se expulsa a nadie. Tampoco se ha dicho cuántos concursantes de la casa 2 pasarán a la 1.
Una de las gracias de todo esto es el personaje de la madre. Una suerte de Dolly Parton con el pelo bien de laca, que tiene el tipo de perrito en casa que te imaginas, y que no ha parado de intentar casar a todas con todos en lo que parece reconocer como un desahogo de lo que probablemente no se podrá beneficiar ella misma. Su hija, en la casa de al lado, que fue Mama Chicho, no sabemos cuánto llorará cuando sus compañeros empiecen a comentar cuán excéntrica es sin saber que es la madre de Saray. Atentos a Pilarica que estresará, será favorita y dará que hablar, aunque esté hecha para salir expulsada en primer lugar.
Entre el resto de los personajes (y sus inseparables vídeos de presentación), un montón de morralla indistinguible de chicos sin novia y chicas «súper-emprendedoras», «súper-luchadoras», «súper-independientes». A destacar la tía de la muñeca, que da bastante miedo; Toscano, el paralítico, del que no se ha mostrado su minusvalía hasta varios planos después de verle haciendo ejercicio o conduciendo; y Nagore, cuyo parecido con Marta Sánchez en algunos gestos es espectacular.
Mercedes, de momento muy comedida, todavía no ha mostrado sus favoritos porque no los conoce bien, pero todo se andará. La seguiremos en Lo que me sale del bolo, uno de los blogs mejor nombrados de toda la red.
Calificación: 7/10
Destacamos: a Pilarica, claramente.
Lo verás si: sigue sin haber un club interesante los jueves.
Predictor: El programa durará mientras viva Mercedes Milá.