El líder de Divine Comedy actuó anoche en El Sol con motivo del 30º aniversario de la sala. Como se había advertido, tocaba él solo con su piano y una guitarra acústica y la única duda que quedaba para el público es si haría un concierto a base de hits o aprovechando la intimidad del recinto, se decantaría por rarezas. Neil se quedó con lo primero, arrancando con nada menos que ‘Tonight We Fly’, y continuando con una de sus canciones más bonitas, ‘Everybody Knows (except you)’. Emocionante desde el principio.
Tras los primeros minutos al piano, se pasó a la guitarra acústica, cuando cayeron, entre otras ‘Becoming More Like Alfie’, ‘Your Daddy’s Car’, ‘Gigantic’ de los Pixies y un pequeño fragmento de una versión improvisada de ‘Ring of Fire’ de Johnny Cash. De vuelta al piano hizo también una revisión de ‘Don’t You Want Me?’ de la Human League, un tema que le encanta desde que lo escuchara en un restaurante. «Le voy a dar un punto Divine Comedy», dijo mientras sonreía al público.
En todo momento bromista y simpático, cantando ‘Cumpleaños feliz’ a una asistente, pidiendo un cigarro aprovechando la cita a un cigarro de una de sus letras y luego rechazándolo alegando: «espera, que estoy tocando una canción», contando su primera borrachera… logró encandilar de nuevo al público (o a casi todos, que ya sabéis que en estos fastos siempre hay muchos invitados que prefieren hablar de gramática y cenas de empresa en las últimas filas a voz en grito) poniéndonos también los dientes largos con respecto a su próximo disco, del que interpretó un tema llamado ‘Indie Disco’, en el que bromea sobre un club que cierra todas las noches con ‘Blue Monday’.
Ya habían sonado ‘A Lady of a Certain Age’, ‘The Frog Princess’ o ‘National Express’ cuando en el bis llegó una ‘Something For The Weekend’ que dice amar aunque odiar por los acordes dificultosos que requiere, en los que metió la pata. Dio igual. Es lo que tiene llevar 15 años haciendo buenas canciones. Que hasta puedes prescindir de ‘Generation Sex’ y que a nadie le importe. 9.