Mark Ronson pasará a la historia como uno de los grandes de la música. Alguien que es capaz de hacer que el ‘Toxic’ de Britney Spears sea venerado por modernos de todo el globo, que prácticamente el mundo al completo caiga rendido a los pies de Amy Winehouse -suya es la producción de la mitad de ‘Back To Black’, y por tanto gran parte del mérito-, que a veces hace palidecer canciones originales con sus versiones (para demostrarlo, ahí está ‘Valerie’) y que es capaz de descubrir nuevos talentos cuando la industria musical prácticamente ni los huele (Daniel Merriweather) o de comprobar si hay algo que rascar bajo el hype (MNDR), se merece absolutamente todo nuestro respeto. Tras tres años de silencio, el británico vuelve a la carga con ‘Record Collection’.
Por suerte, Ronson siempre ha sabido muy bien de quién debe rodearse en sus discos de estudio. Centrado sobre todo en la producción e instrumentación, vuelve a sorprender con colaboraciones de lujo: desde artistas actuales como MNDR, Kyle Falconer, Andrew Wyatt o Rose Elinor Dougall hasta glorias musicales del palo de Boy George o Simon Le Bon.
No debe de haber sido fácil mantener a raya semejante guerra de egos, pero tampoco debe haberlo sido para Mark Ronson colgar el traje, las corbatitas y el sombrero pork pie y teñirse y calzarse el chandal para la mayoría de sus temas. Porque sí, en su nueva etapa como Mark Ronson & the Business Intl., muchas de sus pistas vuelven a sonar a hip-hop, a música negra, a R&B y a Estados Unidos. En definitiva, suenan a ‘Here Comes The Fuzz’, el que fue su disco de debut. Obsesionado con el rap, y como para demostrar lo que se viene encima, los dos primeros singles de ‘Record Collection’ cuentan con Q-Tip y con Spank Rock a las voces y coros. Aunque Ronson tiene tanta mano que es capaz de dosificarlos en la medida justa, para luego poder ir virando hacia otros estilos.
Así los amantes del Ronson más clasicorro verán satisfechas sus necesidades (si es que no han quitado el disco antes) a partir del corte número cuatro, ‘Somebody To Love Me’, una preciosa balada, muy del estilo de Gnarls Barkley, que interpretan a dúo Boy George y Andrew Wyatt sin que uno eclipse con su egocentrismo la particular timidez del otro. Más adelante, el mismo Wyatt y Rose Ellinor Dougall se entregan a una ‘You Gave Me Nothing’ que bien podría estar incluida en un disco de Erasure.
El único pero que quizá se le puede poner a ‘Record Collection’ es el exceso de interludios (cuatro en total, y alguno de más de cuatro minutos de duración), y que pretenden hacer digna la transición entre el aire medio disco de ‘You Gave Me Nothing’ y la potencia vocal de ‘Introducing The Business’. Pero quizá, justo después, vienen a resultar demasiado reiterativos, lo que ensombrece un poco el álbum. Claro, que si todo este postre trae una guinda tan cojonuda como ‘The Night Last Night’, te das cuenta de que la cosa merece la pena.
Calificación: 7,5/10
Lo mejor: ‘Somebody To Love Me’, ‘The Night Last Night’, ‘You Gave Me Nothing’.
Te gustará si te gusta: Gnarls Barkley, Gorillaz, el hip hop alternativo y modernete.
Escúchalo: en Spotify.